Los precios y el mal tiempo perjudican a la Expo

Los 10 primeros días de la Expo de Lisboa se han cerrado con un balance sensiblemente inferior a las previsiones calculadas por la organización. La cifra de visitantes en estos 10 días no superó las 300.000 personas, cuando la organización estimaba una asistencia diaria superior a las 100.000. El mal tiempo y los altos precios en bares y restaurantes, unidos a la entrada diaria (unas 4.250 pesetas), parecen ser el motivo de la escasa afluencia de público. El pabellón del «Reino de España», así reza en su fachada, ha sido uno de los más frecuentados, con cerca de 40.000 visitas.

Los responsables de la muestra internacional, dedicada a los océanos como patrimonio del futuro, han intentado justificar lo ocurrido asegurando que la Expo de Sevilla registró una situación similar durante los primeros días. Nada más lejos de la realidad. Una información de la televisión pública portuguesa (RTP) daba cuenta la semana pasada de las cifras oficiales de la muestra sevillana. Según la RTP, la Expo de Sevilla registró el primer día 150.000 visitas; cerca de dos millones en la primera semana; más de ocho millones en el primer mes y un total de 42 millones en el cómputo final, a pesar de la celebración de los Juegos Olímpicos de Barcelona.

Esperando las vacaciones

Las autoridades lusas confían en que la situación se estabilice con la llegada de las vacaciones, y esperan que la asistencia superará las 50.000 visitas diarias, a pesar de las frecuentes críticas a los altos precios en el recinto. El diario A capital explicaba la semana pasada que «el costo de una visita a la Expo puede suponer más de 50.000 escudos (unas 40.000 pesetas) a una familia media portuguesa (cuatro personas), un valor muy próximo al salario mínimo nacional, que ronda actualmente los 58.600 escudos«. Ante tal situación, la organización de la Expo decidió reducir los precios del agua, el café y los refrescos, mientras otros organismos toman medidas para favorecer la afluencia de público a la muestra. La Federación de Sindicatos de la Función Pública denunció recientemente que «el Instituto de Gestión Financiera de la Seguridad Social ha distribuido entradas de tres días para todos sus funcionarios, lo que constituye un abuso de los dineros públicos «al considerar que esos billetes han sido pagados con «el dinero de todos los contribuyentes".Asimismo, el ayuntamiento de Lisboa, que preside el socialista Joöao Soares, ha decidido también ofrecer entradas a sus 11.000 funcionarios, que entregará con el salario del este mes, según otra información adelantada por la radio TSF.

Por otro lado, el pabellón español batió el pasado sábado su propio récord de asistencia con un total de 4.462 visitas, situándose al límite de su capacidad, a pesar de la discreta afluencia de público a la muestra.

Desde la inauguración del recinto por los Reyes de España, el pabellón ha sido ya visitado por los secretarios generales de los dos sindicatos mayoritarios, Cándido Méndez (UGT) y Antonio Gutiérrez, (CCOO); el presidente de la Generalitat de Cataluña, Jordi Pujol; el presidente de la Comisión Europea, Jacques Santer; el ministro de Defensa, Eduardo Serra, o el ex embajador en Lisboa José Joaquín Puig de la Bellacasa. Hoy está prevista la llegada del vicepresidente del Gobierno, Rodrigo Rato.