La asociación pro eutanasia denuncia los casos encubiertos

La Asociación Derecho a Morir Dignamente rindió ayer en Barcelona homenaje a Ramón Sampedro, el tetrapléjico que murió ingiriendo cianuro tras una estéril batalla jurídica para que en España se reconociera su derecho a la eutanasia. Durante el acto, la vicepresidenta de la asociación Joana Teresa Betancor, denunció los numerosos casos de "eutanasia encubierta" que se practican en España con la complicidad de los médicos, cosa que ocurre, dijo, en un 37% de los casos de enfermos terminales. Betancor también criticó la actitud contraria a la eutanasia por parte de la Conferencia Episcopal, que calificó de "intolerancia fanática" y "encarnizamiento teológico". En el homenaje también estuvo presente la sobrina de Ramón Sampedro, Manuela Sampedro, quien señaló que su familia sigue su lucha por el reconocimiento de aquellas personas que quieran decidir por su propia muerte. "Esa lucha que empezó mi tío no sólo la aceptamos, sino que queremos que acabe como él pretendía, que siente precedente para otras personas", explicó la sobrina del tetrapléjico gallego. La familia ha anunciado que emprenderá acciones legales ante el Tribunal Constitucional para proseguir con la causa que defendió Sampedro.