La patronal de gasolineras amenaza con un paro indefinido desde octubre

El presidente de la Confederación Española de Estaciones de Servicio (CEES), Roberto Sáenz, anunció ayer la convocatoria de un paro indefinido de todas las gasolineras de España como respuesta a la decisión del Gobierno de que las cooperativas de transportistas pueden vender gasóleo directamente a sus asociados. El calendario de movilizaciones se anunciará el próximo 2 de octubre. Hoy se celebra una reunión con los responsables de Industria para intentar una solución.

Los empresarios de estaciones de servicio se reúnen hoy con Nemesio Fernández Cuesta, secretario de Estado de Energía, que ha sido la persona que ha dirigido las anteriores negociaciones. Según Roberto Sáenz, presidente de la patronal sectorial, esta reunión supone la última oportunidad de que no se convoquen los paros indefinidos. La postura de los empresarios de estaciones de servicio es tajante: si Industria no cambia totalmente su planteamiento los paros serán convocados.Las propuestas de la CEES son la indemnización de las estaciones de Servicio que tuvieran que cerrar como consecuencia de que las cooperativas puedan vender gasóleo directamente a los transportistas o bien que "se produzca una auténtica liberalización del sector".

Según manifestó Roberto Sáenz, el Gobierno está engañando desde el pasado mes de febrero a los empresarios de sector y a los consumidores con el argumento de que iba a liberalizar el mercado. Algo que solamente ocurrirá cuando se eliminen las ataduras que suponen los contratos de abanderamiento impuestos por ley en las que las firmar operadoras imponen los márgenes con los que tienen que trabajas las gasolineras".

Apoyo sindical

El presidente de las estaciones de servicio dijo que espera que los sindicatos apoyen las medidas propuestas por los empresarios "ya que supondrá la pérdida de unos 14.000 puestos de trabajo". Según fuentes sindicales, el sector da empleo a unas 30.000 personas. Sobre la posibilidad de que el Gobierno decrete servicios mínimos, Roberto Sáenz dijo que solamente estarán obligados a atender las necesidades de los servicios de urgencia como policía, bombemros y ambulancias.

Ayer la Federación de Industrias Afines de CC OO emitió un comunicado en el que criticaba al Gobierno por desoír los requerimientos del sector y del Consejo de Estados en este terreno e "intentar imponer las medidas liberalizadoras en la comercialización de carburantes y combustibles petrolíferos a través de la Ley de Acompañamiento de los Presupuestos del Estado".

Según esta central, las nuevas medidas contribuyen al deterioro del medio ambiente, incrementará la inseguridad y hará perder unos 12.000 puestos de trabajo en el sector, que ya lleva un continuo goteo de pérdida de puestos de trabajo. A su juicio, las medidas son un atentado contra el sector.