Quirot apaga a Mutola y suma el cuarto oro para Cuba

Ana Fidelia Quirot terminó de apagar el fuego de María Mutola y sumó para Cuba la cuarta medalla de oro tras los saltadores Sotomayor, Pedroso y Quesada. El atletismo cubano, con veteranos y noveles, va a acabar los Mundiales amenazando en el medallero a Estados Unidos, como el grano que siempre fue para los norteamericanos.En enero de 1993, Quirot se quemó en su casa de La Habana mientras cocinaba con luz brillante, el peligroso líquido inflamable que las miserias económicas cubanas obligan al pueblo a utilizar.

La gran corredora cubana tuvo el gran mérito de recuperarse de todo. Y en 1995 incluso logró el mejor resultado de su carrera al ganar el título mundial en Gotemburgo. Pero sin enfrentarse a la mozambiqueña que fue rígidamente descalificada en semifinales por salirse de su calle. Ayer, sin embargo, la batió en toda la línea. Mutola se colocó pronto en cabeza y pasó los 400 metros en 58.32. Quirot, aunque por fuera, se emparejó con ella a los 500 y en la recta final la pasó imparablemente. Mutola, hundida, incluso fue rebasada por la rusa Afanasyeva, mientras la surinamesa Vriesde, también protagonista en cabeza, acabó cuarta. Esta es la tercera vez que Quirot bate a Mutola de las diez ocasiones en que se han enfrentado. Y es la primera vez que la cubana gana la prueba tras batir a la mozambiqueña.

Ana Fidelia dedicó el triunfo al Comandante (Fidel) y al pueblo de Cuba.