Colmenar entierra su vertedero siguiendo las normas europeas

El vertedero de Colmenar Viejo (28.000 habitantes), de 13 hectáreas de extensión, se convertirá en escasos días en el primer gran basurero de la región sellado según las directrices de la Unión Europea. Las labores de sellado, financiadas por la Comunidad con 250 millones, comenzaron en noviembre con la remodelación topográfica y la restauración de taludes del recinto. Posteriormente, se ha impermeabilizado el terreno mediante láminas de polietileno, "lo que impide que cualquier gota que caiga sobre el recinto llegue a los residuos y genere lixiviados", explicó ayer el jefe del servicio de Infraestructuras Ambientales y Gestión de Residuos, Javier Ruiz-Jarabo.El sellado, que el municipio pedía desde hace tiempo por los malos olores del vertedero, culminará en agosto con la regeneración del área mediante una hidrosiembra y la plantación de retamas y plantas autóctonas.

Inaugurado en 1985, fue pensado para dar cobertura a cinco pueblos: Colmenar Viejo, Soto, Manzanares, Miraflores y San Agustín. Cinco años después, el Ayuntamiento cedió su gestión a la Agencia de Medio Ambiente, que lo amplió de 10 a 13 hectáreas, y desde entonces vertieron en él hasta 80 pueblos. En 1994 la Comunidad le dio definitivamente de baja.