Francia aplaza su participación de lleno en la Alianza

El grado de europeización de la proyectada nueva estructura de la Alianza es todavía insuficiente, denunció el ministro de Defensa francés, Alain Richard, en el Consejo Atlántico. Por consiguiente, hay que considerar que " [la cumbre de] Madrid es sólo una etapa, no el momento final de la reforma". Con este circunloquio, Richard, quien pidió "tiempo", anunciaba que París aplaza su incorporación a la nueva estructura, objetivo que anunció en diciembre de 1995. Así, la segunda potencia militar de la Alianza seguirá descolgada.El cogollo del problema es la negativa,de Washington a ceder el mando regional del Sur -en Nápoles, que controla todo el Mediterráneo- a un europeo. Esa era la tercera pieza de la proyectada Identidad Europea de Defensa (IDE), junto a la creación de la figura de un adjunto europeo al comandante supremo de las fuerzas aliadas en Europa (siempre un norteamericano), y la disposición de medios técnicos de la OTAN por la UEO, en las operaciones en que no participen los norteamericanos.

Calentó el ambiente, de madrugada, el secretario de Defensa estadounidense, William Cohen, al manifestar que el litigio del mando Sur estaba "arreglado: lo mantendrá un norteamericano". Y lo recalentó su subsecretario, Walter Slocombe, profetizando: "No veo que Madrid sea la ocasión para resolver este asunto".

Posición propia

La diplomacia francesa respondió más ásperamente que su ministro: "Francia no se integrará en Madrid, porque tal como está diseñada, la nueva estructura militar es más cara y militarmente menos eficaz, y sobre todo, no otorga a los europeos las responsabilidades que les corresponden", argumentó. La IDE "necesita mucho de Francia, pero no es una condición sine qua non" para ella, reaccionó el español Eduardo Serra. Serra reiteró que, aún simpatizando con Francia -son los dos países aún no completamente integrados en la estructura militar-, España adoptará su propia posición "desde la completa independencia". El secretario general, Javier Solana, hizo de tripas corazón, porque "más del 90% de la reforma interna está ya acordado". Y prometió trabajo "duro" para "fraguar el consenso tan pronto como sea posible", sin precisar calendario.El problema del litigio franco-norteamericano y la consiguiente espantada francesa estriba en que, con mayor o menor polémica, la ampliación seguirá su curso. ¿Cómo dar entrada a nuevos socios a una casa aún por reformar? "No hay duda de que la nueva estructura de mandos es tará finalizada a final de año", y aunque la decisión de invitar a los candidatos se tomará oficialmente en Madrid, las negociaciones de adhesión sólo acabarán después de la reforma interna", explicó Solana.