El recorte amenaza la profesionalización

Septiembre será el mes de la batalla presupuestaria. Defensa aspira a mantener en 1997 su actual presupuesto, con una ligera subida para compensar la inflación. La postura del PP en la oposición, donde pedía el aumento de los gastos militares, y la necesidad de acelerar la profesionalización del Ejército, para poder suprimir la mili, apoyan esta pretensión.Sin embargo, el presidente José María Aznar ya ha adelantado que hay que recortar 1,2 billones de pesetas en el gasto público y parece difícil que algún departamento pueda librarse de la tijera.

Por lo pronto, Defensa ha pisado freno en sus planes de profesionalización. De los 10.000 nuevos soldados que pensaba contratar en 1997, el triple que este año, ha pasado a 4.500 o 5.000, menos del 50% de aumento. Eso quiere decir que España no tendrá 150.000 militares profesionales en el 2003, como se anunció. La solución pasaría por la mili voluntaria, y no retribuida, para hombres y mujeres que anunció Serra en La Coruña. Está por ver cuántos/as se apuntan.