Apagones

Los recortes presupuestarios de la ESA no admiten dilación y ya se están tomando las primeras medidas en los programas científicos y de observación de la Tierra. En mayo se apagará el primer satélite ERS, que ha permitido a los europeos ver la superficie terrestre y los océanos a pesar de las nubes y a los estadounidenses hacer con sus datos y, otros un nuevo y completo mapa del fondo de los mares. En los últimos meses el ERS-1 ha funcionado en combinación con el ERS-2, lanzado el año pasado y que seguirá funcionando. Y en septiembre dejará de seguirse el veterano satélite IUE que observa el cielo en ultravioleta desde el año 1978. Sí se permitirá a la nave Ulysses dar otra vuelta al Sol y se mantendrá la participación europea en la explotación del telescopio Hubble.