"Por fin estamos aquí"

Gertrude Mongella, la diplomática tanzana elegida secretaria general de esta conferencia, lo dijo con alivio ante el plenario de la ONU: "Por fin estamos aquí, en Pekín". Han sido cinco años de trabajo que Mongella vio tambalearse los últimos días debido a la actitud china de entorpecer las actividades del foro paralelo de las ONG, que comenzó en Huerú, a 60 kilómetros de la capital, el pasado miércoles.Tras la amenaza de las ONG de terminar con el foro si China seguía impidiendo la libertad de expresión, las promesas chinas y el comienzo del foro oficial parecen haber calmado los ánimos. Ayer, los elogios al país anfitrión, diseminados entre los diversos discursos, fueron recibidos por el auditorio con un respetuoso silencio. "China", decía Ismat Kittani, subsecretario general de la ONU (Butros-Gali no ha podido venir por estar indispuesto), "es un miembro clave y uno de los mayores soportes de Naciones Unidas"... "Es una superpotencia, con un relevante papel que jugar en la elaboración del orden internacional de la posguerra fría", añadía cauto.