El inversor exterior confía en la política del Gobierno, según Narcís Serra

Tras dos días en contacto con la élite económica y financiera in ternacional, recluida estos días en la localidad alpina de Davos (Suiza), el vicepresidente del Gobierno, Narcís Serra, no ha apreciado preocupación alguna por la situación política española.Una impresión que era compartida por otros empresarios españoles asistentes a este foro económico.

En cambio, dijo ayer el vicepresidente del Gobierno a un grupo de periodistas, los líderes económicos sí le han transmitido su confianza en la lucha del Gobierno contra el déficit público y en la buena marcha de la economía española.

Narcís Serra insistió en que el Ejecutivo está firmemente decidido a tornar las medidas que sean necesarias para continuar reduciendo el desequilibrio en las cuentas públicas, yendo más allá, si fuese necesario, del paquete de medidas recientemente aprobado por el Consejo de Ministros para reducir el gasto de la Administración en 150.000 millones de pesetas. "Se tomarán las medidas necesarias", dijo, aunque la recuperación económica, que supone una mayor recaudación fiscal, evitará que éstas sean drásticas, añadió.

La reducción del déficit público, afirmó Serra, es necesaria para mantener la paridad de la peseta frente al resto de las monedas, reducir los tipos de interés y dar credibilidad a la economía española.

Exportaciones competitivas

El vicepresidente aseguró que algunos empresarios belgas y alemanes le han transmitido su preocupación por la "excesiva" depreciación de la peseta y la ventaja que esta caída da a las exportaciones españolas a la Unión Europea. Las exportaciones españolas han crecido tres veces más que la media europea en los últimos dos años. Temen, en definitiva, según explicó Serra, que España haga una política de devaluaciones competitivas.

Pero la vulnerabilidad de la peseta se mantendrá, añadió, mientras que no, se solucione la crisis mexicana y el dólar estadounidense siga débil. El marco alemán, por su carácter de moneda refugio, es el primer beneficiado de esta situación. Las monedas europeas de los países con más desequilibrios económicos -la peseta, entre ellos- son las que sufren esta apreciación del marco. El vicepresidente cree, no obstante, que en el medio plazo la divisa española recuperará posiciones gracias a la buena marcha de la economía.

La nueva etapa de crecimiento que está viviendo Europa ha resucitado los criterios de convergencia de Maastricht para acceder a la Unión Monetaria Europea. Han cesado los ataques contra estos criterios y ahora se vuelve aconsiderar algo necesario en esta nueva etapa de crecimiento económico.