Llamas, viento y agua contra Yeste

Las laderas de los valles de los ríos Segura y Tus se han cubierto con una gruesa alfombra de ceniza. El incendio que desde el domingo asuela Yeste (Albacete) ya ha costado la vida a un vecino de la aldea de La Tejeruela, ha arrasado más de 6.500 hectáreas de bosque y anoche avanzaba con violencia. Y por si fuera poco, una avioneta prendió ayer intencionadamente tres nuevos focos, según el consejero de Medio Ambiente de Castilla-La Mancha, Fernando López.El fuerte viento, la extrema sequía y lo accidentado de la zona dificultan la extinción. Los vecinos de varias de las 16 aldeas (unas 1.000 personas) que fueron desalojadas han comenzado a volver a sus hogares. Regresaban sobre asfalto negro y tierra quemada.

Más desgracias. El pantano de la Fuensanta, en Yeste, está al 3% de su capacidad, y el del Cenajo, al 5%. "Están casi vacíos y los hidroaviones no pueden cargar", afirma Juan José Parrilla, presidente de la Confederación Hidrográfica. Los aparatos tampoco han podido usar el agua del trasvase Tajo-Segura, que llega al embalse de Talave. "Es demasiado corto". Los aviones han tenido que respostar en la base de Los Llanos en Albacete, a 70 kilómetros por aire de Yeste.