La matanza de Hebrón atiza el fuego de la Intifada

Soldados israelíes mataron ayer a otros tres palestinos e hirieron a por lo menos 40 en enfrentamientos en Cisjordania y Gaza mientras en Israel crecen los temores de venganza tras la matanza de cerca de 50 palestinos en Hebrón hace tres días. Miles de palestinos se lanzaron a las calles de los territorios ocupados para desafiar a pedradas la presencia de soldados bien armados de contingentes que Israel movilizó en previsión de disturbios mayores. Gaza y Cisjordania fueron cerradas por el Ejército para impedir la entrada de militantes de organizaciones extremistas que han jurado vengar la matanza del viernes.

"Así podremos reducir el gran riesgo de ataques y tendremos tiempo para que las tensiones -de ellos y nuestras- se diluyan", declaró el jefe de policía Rafi Peled, al justificar el cierre de los territorios ocupados.Ese proceso puede durar más de lo previsto. Ayer la calle palestina era el cauce de una ira impresionante. Desde los mismos mástiles donde comenzaron a ondear banderas palestinas en los días de euforia nacionalista tras la firma del acuerdo de paz entre Israel y la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) en septiembre, ayer flameaban millares de banderas negras.

Radio Israel dijo que dos civiles israelíes, incluyendo un bebé, sufrieron heridas cuando el vehículo en el que viajaban fue apedreado en una carretera de Cisjordania. El tráfico en las carreteras reservadas para colonos judíos era prácticamente nulo.

Soldados israelíes, entretanto ampliaron el toque de queda al asentamiento judío de Kiryat Arba, cerca de Hebrón, donde vivía Baruch Goldstein, el inmigrante norteamericano autor de la masacre. Es la primera vez en la historia de Israel que el Ejército aplica esa medida en un asentamiento judío.

Hebrón fue declarada "zona militar" y permaneció cerrada por el Ejército. Sin embargo, fuentes locales contactadas por teléfono dijeron que se registraron numerosos choques durante la jornada. El único balance de bajas disponible en Hebrón registraba tres palestinos heridos.

En Gaza, fuentes locales señalaron que un palestino identificado como Auni Ruduán Abu Aja fue abatido con un disparo en el cuello. "Gaza está viviendo horas sumamente violentas y la tensión es gigantesca. Soldados y activistas por todas partes", afirmó un residente contactado por teléfono. En el pueblo cisjordano de Tulkarem, soldados israelíes mataron al palestino Kamel Adnán, de 19 años, durante violentos enfrentamientos, dijeron fuentes palestinas. En Jenín la escena era idéntica. En Gaza y Cisjordania se registraron por lo menos 40 heridos, incluyendo algunos palestinos alcanzados por balas de plástico en esporádicos choques en las afueras de Jerusalén oriental. Las actividades en todos los territorios ocupados han quedado totalmente paralizadas por tres días de duelo.

En la sombría atmósfera de Jerusalén la preocupación por la serie de amenazas de grupos extremistas era tangible. "Va a haber venganza, de eso no hay que dudar", era el consejo de una gran mayoría de palestinos, funcionarios de organismos internacionales y residentes extranjeros. A las agrupaciones establecidas como el Hamás, el movimiento de la resistencia islámica, se ha sumado el coro de amenazas de grupos hasta ahora poco conocidos, como el llamado Movimiento de la Yihad Islámica en Palestina. Un comunicado distribuido en Beirut dijo que el grupo realizará un atentado "en las próximas 24 horas".