El director de la Guardia Civil debe más de 66 millones

Luis Roldán explicó ayer que desde que accedió a la dirección de la Guardia Civil, en 1986, ha adquirido una casa en Cizur Menor (Navarra), el piso de la zona de la Castellana donde pensaba vivir con su actual mujer, Blanca Rodríguez, cuando dejase la Guardia Civil, y un chalé adosado en Aravaca que corresponde a su único hijo. Sus deudas hipotecarias superan los 166 millones de pesetas. Piso de Cizur (Navarra). Se compró construido por 22 millones, aunque debe 15,5 millones de un crédito a 15 años con un interés del 14,08 %.

Piso en Madrid. Lo compró por 60 millones en la zona de la Castellana, con un crédito de 50 millones del BBV al 16 % durante 10 años. Todavía debe 43,8 millones.

Adosado de Aravaca (Madrid). Fue comprado a nombre de su hijo en 1991, por medio de una hipoteca de 9 millones. Quedan por pagar 7 millones.

Sobre el patrimonio adquirido antes de su nombramiento, Roldán aclaró que procede de 22 años de trabajo como director de una importante empresa, así como al regalo de su padre de un piso en la calle Cervantes de Zaragoza cuando se casó, en 1968. De las propiedades que tenía antes de acceder al cargo y conserva, destaca:

Finca rústica en Zaragoza. 18 hectáreas destinadas al cultivo de melocotones, de la que compró, según escritura, una parte valorada en 1.967.000 pesetas.

Otras propiedades adquiridas antes de su nombramiento como director de la Guardia Civil y que fueron adjudicadas a su ex esposa, Ángeles Cimorra, tras el divorcio son:

Dúplex en Cambrils. Comprado en 1980 por dos millones.

Cuatro parcelas en Cambrils. Adquiridas a mediados de 1986, por un valor total de 14.040.000 pesetas.

Piso en Zaragoza. Comprado en 1972 en la calle de San Fernando. El garaje, en la calle Lapuyade, fue escriturado en 1978.

Chalé en Zaragoza. Situado en la calle Ruiseñores, fue escriturado en 1988 en 17,3 millones y es consecuencia de la venta de otro adosado en Zaragoza.

Piso en Pamplona. Se compró en la calle Bergamín por ocho millones a los siete meses de ser director de la Guardia Civil.