Puesta en libertad la enfermera española detenida en Guinea Ecuatorial

La enfermera española Lourdes Vázquez fue puesta en libertad ayer a las once de la noche en Malabo (Guinea Ecuatorial), según fuentes diplomáticas. Vázquez, que fue detenida el pasado lunes sin explicación oficial, había sido trasladada a la capital guineana desde la ciudad de Bata. Poco antes de su puesta en libertad, agentes de la policía guineana echaron de la Secretaría de la Seguridad del Estado al secretario de la Embajada española, José María Ridao, y a sus escoltas al grito de "¡Fuera, asquerosos españoles!". Según los testigos, los insultos estuvieron a punto de provocar un grave altercado entre los escoltas y los policías.

La agresividad de una decena de policías guineanos, encabezados por el comisario Vitoriano Elá Nsang, no tuvo mayores consecuencias gracias a que Ridao pidió a sus escoltas que mantuviesen la calma. Según testigos presenciales, Ridao había acudido a la sede de la Seguridad para recabar información sobre Lourdes Vázquez, la enfermera de la organización de Médicos sin Fronteras detenida el lunes en Bata. Tras haber permanecido incomunicada dos días en los calabozos de la capital continental, las autoridades guineanas decidieron trasladarla ayer en avión a Malabo con vistas a materializar, el sábado, en el vuelo semanal de Iberia, la orden de expulsión decretada el lunes contra ella.Los diplomáticos españoles en la capital guineana habían intentado acercarse a Lourdes a su Regada a Malabo. Sin embargo, según diversos testimonios, a la jóven sólo le dio tiempo a implorar: "¡No me dejéis sola!". Los representantes españoles no tuvieron tiempo más que de pronunciar algunas frases tranquilizadoras. Unos miembros de la Seguridad guineana conminaron bruscamente a Vázquez a introducirse en un vehículo que arrancó de inmediato. Las autoridades guineanas no han alegado ninguna razón que justifique esta detención. Según miembros de la cooperación en Bata, sin embargo, la única responsabilidad de Lourdes es ser hermana de una integrante del grupo de seis turistas detenidos el domingo en esta ciudad y expulsados el martes a Camerún. En la madrugada de ayer, la Embajada española en Camerún tuvo que rescatar en la selva a este grupo de españoles, que, en plena época de lluvias, se habían quedado con su vehículo embarrancado a 15 kilómetros del poblado de Kibri.