Latinoamérica, la asignatura pendiente

Los nombramientos de Bill Clinton para los puestos responsables de las relaciones con América Latina han provocado una gran polémica en círculos acádémicos y políticos de Estados Unidos, que, tanto desde la derecha como desde la izquierda, acusan al nuevo presidente de haber fallado a las expectativas que existían enesa área. De hecho, el de secretario de Estado adjunto para Asuntos Hemisféricos es el único alto cargo de la nueva Administración que no ha podido ser ocupado todavía debido a discrepancias políticas.Bill Clinton eligió inicialmente para ese puesto, el de mayor responsabilidad del Gobierno en asuntos latinoamericano s, a Mario Baeza, un abogado neoyorquino, de padres cubanos y de raza negra. El nombramiento ha sido tan contestado que el presidente ha tenido que dejar en suspenso su decisión y ha pedido al republicano que ocupaba ese

.puesto hasta ahora, . Bernard Aronson, que siga en su lugar hasta que se anuncie el nombre de su sucesor. '

Otros dos subsecretarios de. Estado de la anterior Administración seguirán con el nuevo equipo, pero en su caso ha sido por la propia voluntad de Clinton, que quiere seguir contando con ellos por el momento.

La cuestión cubana

El nombre de Mario Baeza ha sido rotunda mente objetado por los sectores que defienden más radicalmente una política de enfrentamiento con el presidente cubano, Fidel Castro, especialmente la Fundación Cubano-Americana y el congresista demócrata Robert Torricelli, el autor de la última legislación de bloqueo económico a la isla.

Esos sectores se quejan de que Mario Baeza sostuvo en el pasado contactos con grupo s de empresarios europeos que inviertenen Cuba, e incluso llegó a visitar en una ocasión La Habana dentro de una gira organizada por esos hombres de negocios.

Al mismo tiempo, sectores académicos vinculados a las relaciones con América Latina estimaban que Baeza no contaba con ninguna experiencia en esa área y estaba demasiado vinculado al mundo de los lobbies (grupos de presión) de Washington. Baeza ha hecho millones de dólares trabajando en un despacho que defiende los intereses de varias corporaciones importantes..

El nombre de Baeza fue sugerido por Vernon Jordan, el presidente del equipo de transición de Clinton, que propuso al descendiente cubano, a quien conocía de su trabajo como lobbysta, para satisfacer al mismo tiempo a las minorías hispana y negra.

Para otros dos cargos vinculados con América Latina, Clinton ha nombrado embajadora ante la Organización de Estados Americanos a Hattie Batbitt, de quien no se conocen más antedecentes que el de ser esposa del nuevo secretario del Interior, y como encargado de Asuntos Latinoamericanos en el Consejo Nacional. de Seguridad, a Richard Feinberg, un académico.