Cierra un bar de Algete frecuentado por dominicanos

El restaurante de Algete denominado El Cortijo, frecuentado por trabajadores de origen dominicano, cerró definitivamente sus puertas el pasado seis de enero, tras las quejas de los vecinos por ruidos y la supuesta venta de droga y prostitución en el local.

El propietario del negocio, José Rueda, aseguró a la agencia Efe el pasado mes de diciembre que cerraría el local porque, dijo, "ya no saben qué hacer para que me vaya". Rueda se refería a las acusaciones que, según él, está formulando contra su local el vecindario y a las advertencias del Ayuntamiento de esta localidad, de 9.700 habitantes.

Los problemas con este restaurante motivaron una reunión de la alcaldesa, Magdalena Teixeiro, y el primer teniente de alcalde, José Antonio Gómez Marcos, con el dueño del establecimiento, en noviembre pasado.

Según el dueño del local, las autoridades municipales le advirtieron que cerrarían el local "si seguían los problemas", mientras que Gómez Marcos afirmó que "sólo le comentamos que tuviese cuidado". Fue el propio José Rueda, según explica Gómez Marcos, quien comunicó su intención de cerrar "porque no le iba muy bien el negocio".

El teniente de alcalde de Algete explicó también que la reunión se motivó "por las sospechas de delincuencia y los comentarios de lo que podría haber detrás" de las reuniones de los trabajadores dominicanos que frecuentan el local.

José Rueda, que opina que algo de racismo hay", ha rechazado tales acusaciones vacinales. Este local también era un lugar de cita para algunos de los dominicanos que residen en la vecina localidad de Aravaca.