Belgrado recibe sin sorpresa la comisión para investigar crímenes de guerra

Los criminales de guerra circulan libres por las calles de Belgrado y Zagreb, operan con impunidad en los campos de batalla bosnios y son frecuentemente celebrados como héroes. La creación ayer, por el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas de una comisión para preparar la documentación para un eventual juicio a los criminales de guerra, -un Núremberg balcánico-, fue recibida sin sorpresa en Belgrado, donde la manera de ocultar los crímenes serbios, que no se niegan, es compararlos con los de croatas y musulmanes.Ninguna fuerza política en Serbia se opone, en principio, a las investigaciones sobre los crímenes de guerra, pero en cuanto salgan a la luz los primeros nombres de los culpables y se exija su extradición el ambiente puede cambiar: habrá que aceptar que muchos héroes de guerra no son sino criminales.

Por lo pronto, ninguna parte implicada en la guerra en Croacia y Bosnia ha juzgado a los responsables de los crímenes. Ze1jko Raznjatovic-Arkan, uno de los comandantes de las tropas irregulares serbias, cuyos crímenes han sido fotografiados por varios reporteros, no tiene problemas con la Justicia. Tampoco los tiene en Zagreb Tomislav Mercep, cuyas tropas son definidas por el semanario Danas como el germen de los escuadrones de la muerte.

La flagrante violación de los derechos humanos, la persecución y el asesinato por motivos étnicos, precede al comienzo de las hostilidades abiertas en Croacia. No en vano, Tadeusz Mazowiecki, relator especial de la Comisión de Derechos Humanos de la ONU para Yugoslavia comentó ayer que la creación de la nueva comisión Ilega tarde".