Los detenidos del FIS

"La detención de los militantes del Frente Islámico de Salvación (FIS) no es la solución a los problemas de Argelia", admite Sid Ahmed Gozali al referirse a los campos de detención en el desierto del Sáhara, donde, según la Liga para la Defensa de Derechos Humanos de Argelia, dirigida por el abogado Alí Yahia, actualmente se hallan concentrados entre 30.000 y 50.000 personas sospechosas de simpatizar con el movimiento integrista.Frente a estas denuncias, Gozali asegura que los detenidos no superan las 6.500 personas y que "gente como Yahia, que tienen unos intereses económicos y políticos en la defensa de los islamistas, han exagerado las supuestas malas condiciones de vida de los presos". "Es cierto que los presos no han recibido visitas, pero no porque las autoridades se lo hayan impedido, sino porque los presos se negaron a recibir a los familiares que se habían desplazado hasta allí para verlos", añade,

"La detención siempre tiene efectos negativos", dice Gozali al ser preguntado sobre la posibilidad de que la represión refuerce y consolide el movimiento integrista. "Puede ocurrir que si hay mil presos concentrados en un mismo recinto, de los cuales sólo 500 son partidarios de medios de, lucha violentos, que los extremistas arrastren a sus tesis á los moderados", añade.

Pero para el jefe de Gobierno argelino, "el peor de los riesgos es la falta de una solución a los problemas económicos que han engendrado el terror integrista". En este sentido, considera clave la "contribución de las potencias que apoyan la democratización".

Respecto a su visita a España, donde se ha entrevistado con el presidente del Gobierno, Felipe González, Gozali asegura: "No he venido a mendigar, sino a dar mi versión de cuál es la situación argelina". Su resultado es positivo.