La administración vasca pagará 2.000 millones a la Fundación Guggenheim

La Administración vasca aportará un total de 19.000 millones de pesetas para la construcción y mantenimiento de la sede bilbaina de la Fundación Guggenhem que se abrirá dentro de cuatro años. Al margen de otras aportaciones, la administración deberá pagar 2.000 millones a la citada entidad. La firma del contrato, en el que figuran tales compromisos, está pendiente de acuerdo del Gobierno vasco.

A cambio, de la asistencia técnica y la cesión de colecciones de la Fundación Guggenheim, el Gobierno vasco y la Diputación de Vizcaya pagarán a la entidad neoyorquina 20 millones de dólares (más de 2.000 millones de pesetas), asumirán la construcción del edificio, diseñado por el arquitecto Frank Gehry y presupuestado en más de 12.000 millones de pesetas, y se comprometerán a destinar 5.000 millones para la adquisición de piezas de arte. La firma del contrato ha sido pospuesta hasta lograr el consenso de los socialistas en el Gobierno vasco de coalición.La Fundación Museo Guggenheim Bilbao (FMGB) será una entidad privada, cuya gestión quedará en manos del organismo norteamericano. En el comité ejecutivo, máximo órgano de gobierno, estarán presentes en igual proporción representantes de la Guggenheim y de las instituciones vascas.

El edificio proyectado por Gehry será construido en piedra y cubierto por una estructura de acero, y quedará ubicado en un solar de 46.000 metros cuadrados, situado en la ribera de la ría del Nervión a su paso por el centro de la ciudad. El coste de edificación del inmueble se acerca a los 10.000 millones, a los que habrá que sumar otros 2.000 para afrontar las infraestructuras urbanas necesarias.

En el contrato que suscribirán las instituciones vascas y la Fundación Guggenheim "ambas partes se comprometen a garantizar que el museo funcione al máximo nivel de calidad", según explicó el diputado de Hacienda de Vizcaya, Juan Luis Laskurain, uno de los negociadores del acuerdo. Junto a la colección esencial, constituida por la totalidad de las obras propiedad de la Fundación norteamericana que serán trasladadas a Bilbao de forma rotativa, el museo contará con 13 galerías destinadas a otros tantos artistas contemporáneos, una colección que se formará con obras de futura adquisición y una sección dedicada al arte vasco y español.

El acuerdo alcanzado prevé una validez inicial del acuerdo de 20 años, prorrogables a 75. La Guggenheim se compromete a consultar a la Administración vasca antes de asumir otros compromisos para nuevos museos.

Para la construcción del edificio, el Ayuntamiento de Bilbao cederá los terreno y constituirá junto al Gobierno vasco y la Diputación de Vizcaya una sociedad inmobiliaria, que será propietaria del inmueble y lo arrendará a la fundación.