Yeltsin creará un banco central de Rusia con los activos del actual Gosbank

El presidente de Rusia, Borís Yeltsin, anunció ayer por sorpresa, en una reunión con dirigentes municipales de distintas ciudades rusas, que acababa de enviar al Congreso de los Diputados del Pueblo, reunido desde el lunes, un proyecto para la creación del Banco Central de Rusia, que debería hacerse cargo de los activos de que actualmente dispone el Banco Central de la Unión Soviética (Gosbank).

El presidente ruso explicó que había tomado esa decisión después de que el presidente de la Unión Soviética, Mijaíl Gorbachov, hubiera ordenado una nueva emisión de moneda por valor de 30.000 millones de rublos sin establecer las pertinentes consultas con los dirigentes de las repúblicas. "Una decisión de este tipo", precisó, "no es posible después de la firma del acuerdo económico" suscrito por varias repúblicas soberanas. El propio Yeltsin reconoció que se trataba de "una iniciativa audaz", pero la justificó diciendo que si se pretende controlar la economía no es posible dejar en manos de otros la emisión de moneda.En su discurso ante el Congreso ruso el lunes pasado, Borís Yeltsin adelantó que consideraba necesaria una profunda reforma del sistema financiero para poder controlar en lo posible la inflación, que ya en la actualidad se estima que alcanza el 15% mensual. El presidente ruso anunció ese mismo día que pensaba asumir la jefatura del Gobierno y que iba a pedir poderes excepcionales para llevar a cabo la reforma económica. Esos poderes los concretó el miércoles en dos proyectos de ley que prevén que gobierne por decreto en materia económica -pasando por encima de las leyes de la Unión Soviética o de Rusia ahora vigentes- y le dejan las manos libres para reorganizar el Gobierno y toda la pirámide ejecutiva rusa. Asimismo dejarán de hacerse elecciones durante un año en todo el territorio ruso.

Sobre el anuncio de Yeltsin de crear el Banco Central de Rusia, su consejero Serguéi Stankevich precisó a la agencia Tass que esto no era un hecho consumado y que, de la misma manera que el proyecto de ley iba a ser sometido a la consideración del Congreso ruso, también iba a ser debatido con las otras repúblicas. Según el acuerdo de Unión Económica recientemente firmado por las repúblicas, los activos del Gosbank iban a ser divididos entre los diferentes estados soberanos tras una negociación con el centro.

Al conocerse el anuncio de Yeltsín, los pasillos del palacio del Kremlin, donde celebra su reunión el Congreso de los Diputados, se dividieron entre los que consideran que se trata de una muestra de la decidida intención del presidente ruso de convertir a Rusia en la heredera de la Unión Soviética -aunque siga dejando la posibilidad a las demás repúblicas de sumarse al carro de su profunda reforma económica-, y los que creen que es una manera de presionar para que se llegue con rapidez a acuerdos de reforma del sistema financiero, dada la situación de emergencia en que se encuentra el país.

Liberalización de precios

El anuncio de la liberalización de los precios que hizo el lunes ha desatado una enorme polémica en todos los ámbitos de la sociedad rusa. Algunos medios ya denominan al Ejecutivo que se forme para dirigir la reforma como "el Gobierno kamikaze". En los medios de comunicación, los expertos en economía tratan de explicar los graves problemas sociales que generará el reajuste y cómo tratar de paliarlos. Un reformista como Nikolai Smélov comentó por televisión que cinco o diez productos básicos debían mantenerse racionados y con precios fijos "para evitar que la gente se muera de hambre".