Tres empresas mineras de León deben fusionarse y reducir sus plantillas

Las empresas mineras Antracitas de Gaiztarro, Antracitas de Fabero y Minas del Bierzo deberán proceder a su fusión en los próximos días, según un plan iniciado hace poco más de año y medio que pretende remontar las dificultades financieras en las que se encuentran las tres sociedades con la explotación conjunta de una zona en Fabero, denominada la gran corta, con un importante yacimiento de carbón evaluado en 17 millones de toneladas de Antracita.

El plan cuatrienal contempla ayudas y subvenciones de las administraciones central y autonómica por un monto total que asciende a unos 6.000 millones de pesetas.

La fusión de estas tres empresas mineras, situadas en la cuenca de Fabero, es la primera operación de este tipo que se realiza en el sector en León y conlleva un plan conjunto a cuatro años donde se contemplan la reducción de unos 400 puestos de trabajo, de una plantilla conjunta de 1.300 empleados, un número indeterminado de prejubilaciones, la jubilación de 235 trabajadores, el cierre de dos grupos mineros y la potenciación de las concesiones a cielo abierto.

No obstante, el consejo de administración de Antracitas de Fabero aún no ha dado el visto bueno definitivo al acuerdo, que de no llevarse a cabo en los próximos días quedaría anulado, según los plazos dados por la Administración central.

Antracitas de Gaitzarro cuenta en la actualidad con una plantilla de unos 840 trabajadores. Según se refleja en el plan, el grupo Caleyo se clausurará el próximo año. En cuanto a Antracitas de Fabero -arrendataria de las concesiones de Minas del Bierzo-, con unos 450 trabajadores, se paralizaría el grupo Alicia, potenciándose el grupo Alfredo.