Acto de fuerza

La crisis del golfo Pérsico, que ha hecho planear amenazas sobre la paz mundial, ha sido -como usted sabrá- el resultado de un acto de fuerza cometido por un país miembro de la comunidad internacional contra otro Estado soberano.La reacción internacional ante la invasión y ocupación de Kuwait por parte de Irak es un precedente positivo para la salvaguardia de la paz y la seguridad mundial, especialmente el creciente protagonismo que va asumiendo la Organización de las Naciones Unidas en la solución de este tipo de conflictos.

Sin embargo, es decepcionante que la agresión iraquí sea más condenable que otras acciones similares llevadas a cabo en los últimos años entre pueblos que han visto invadido su territorio, negándoseles sus derechos legítimos a la autodeterminación y a la independencia ante la pasividad, y en muchos casos complicidad, de los Gobiernos que ahora se presentan como los máximos defensores del derecho internacional.

La invasión y anexión por la fuerza del Sáhara occidental por parte del reino de Marruecos es un claro ejemplo de lo expuesto.

Nadie puede olvidar en nuestro país que la ocupación marroquí de nuestra antigua colonia ha provocado el exilio forzoso de todo un pueblo y la pérdida de miles de vidas humanas en una guerra que se mantiene desde hace 15 años y en la que repetidamente se han esgrimido armas, municiones y efectos militares españoles.

¿Con qué autoridad moral se denuncia a Irak si al mismo tiempo se observa un silencio cómplice en la ocupación del Sáhara occidental por las tropas marroquíes ... ?

¿Por qué a Irak se le impone el bloqueo y a Marruecos se le ofrece todo tipo de ayudas financieras y militares?

Por todo ello, nos dirigimos a su periódico para solicitar la publicación de esta carta, que sirva , en alguna medida, de aclaración y petición para que Marruecos acate finalmente las múltiples resoluciones de las Naciones Unidas para el Sáhara occidental y se logre una solución pacífica a este doloroso conflicto, en el que España, por razones históricas y morales, debe jugar un papel decisivo.- José Taboada.