Varias embajadas occidentales podrán repatriar a las mujeres y niños

Á. E. Las esperanzas de libertad para mujeres y niños occidentales retenidos en Irak y Kuwait empezaron a concretarse ayer con la salida de los primeros grupos, entre los que no se encontraba ningún español. De todas formas, la exigencia iraquí de que la evacuación se haga en aviones de la compañía nacional, Iraqui Airways, está dificultando su puesta en marcha. El Gobierno de Sadam Husein pretende que sus aparatos reciban autorización para aterrizar en París y Londres, donde, además de repostar carburante, recogerían a los iraquíes residentes en Francia y el Reino Unido.

Unas 2.000 personas occidentales, entre mujeres y niños, así como 80 japoneses, esperan aún poder abandonar Irak y Kuwait, cuatro días después de que Bagdad anunciara que autorizaba su salida. Un primer grupo de 19 italianos atravesaron ayer la frontera terreste de Irak con Jordania. Otra italiana había llegado a Ammán poco antes, en el vuelo diario de Iraqui Airways, junto con una finiandesa, unanorteamericana y una pareja de suizos. Cuatro italianas más alcanzaron Jordania en su propio vehículo, con lo que el número de liberados potenciales de esa nacionalidad se reduce a 70.

Durante todo el día se esperó la repatriación de 132 británicos que contaban ya con los pertinentes visádos de salida. Bagdad arguyó que necesitaba una autorización de aterrizaje de Londres para que el aparato previsto pudiera despegar del aeropuerto internacional Sadam. Según el Ministerio de Exteriores italiano, un grupo de 173 mujeres y niños extranjeros, en su mayoría británicos, salió de Bagdad con destino a "Ammán y Londres".

38 españoles

Los Gobiernos europeos temen que la exigencia iraquí de que sus aviones aterricen y sean abastecidos de carburante en París y Londres pretenda forzarles a violar el embargo económico impuesto contra Irak. Las autoridades de Bagdad se defienden de esta acusación asegurando que no se trata de ningún chantaje, puesto que siempre cabe la solución, menos rápida, de abandonar su país por vía terrestre.

Con esa esperanza partió ayer de Kuwait con destino a la capital iraquí un grupo de 38 mujeres y niños españoles, a los que acompañaban los maridos de cuatro de ellas, todos de nacionalidad jordana. La caravana, organizada por el encargado de negocios, Juan José Buitrago, constaba de,un autobús, con 22 pasajeros, y cuatro turismos, con el resto. La Embajada de España en Bagdad tramita desde ayer los permisos necesarios para que puedan abandonar el país.

Además, ya hace tres días que se iniciaron las gestiones para la salida de otras 17 personas retenidas en Irak y que podrían salir de acuerdo con las promesas del presidente Sadam Husein. Según fuentes diplomáticas, sólo 27 españoles permanecen aún en Kuwait. Éstos, según Buitrago, se encuentran bien.