Un cirujano deberá pagar 10 millones a los padres de un niño muerto tras una operación

El Juzgado de lo Penal número 8 de Valencia ha condenado al cirujano Juan Antonio Velázquez a indemnizar con 10 millones de pesetas a los padres del niño de el neo años Víctor Llorens, fallecido en el hospital La Fe de Valencia, un mes después de ser operado de apendieltis. El cirujano ha sido condenado además a una multa de 25.000 pesetas por una falta de imprudencia.El doctor Velázquez era jefe clínico de cirugía infantil el 14 de abril de 1984, cuando el menor falleció en el citado centro. La sentencia ha absuelto a tres cirujanos y una anestesista, que atendieron al pequeño durante su hospitalización al considerar que su conducta no fue imprudente.

Víctor fue operado de apendicitis el 17 de marzo de 1984. Cinco días después, los médicos drenaron un absceso en la herida y el pequeño fue dado de alta "en vías de curación". Una semana más tarde, los padres volvieron a urgencias porque el niño tenía fiebre y dolores y fue intervenido de una peritonitis. El 13 de abril los médicos observaron un absceso en la fosa ilíaca derecha, pero Víctor falleció 24 horas más tarde de una pericarditis.

La sentencia precisa que la Finalidad curativa de la medicina se vuelve llícita "cuando por impericia o descuido se expone al enfermo al trance de ocasionar un mal".