El nuevo proyecto del Centro Cultural de Bilbao mantiene el polémico cubo de cristal y acero

El nuevo proyecto arquitectónico del Centro Cultural de Bilbao, encargado por el Ayuntamiento de la capital vizcaína al arquitecto Francisco Javier Sainz de Oiza, mantiene la construcción de una plaza cubierta por un enorme cubo de cristal y acero, levantado tras las fachadas originales de la antigua Alhóndiga, pero altera el diseño inicial del complejo, al eliminar la pasarela suspendida a 25 metros de altura destinada a albergar la mayor parte de las instalaciones. El arquitecto manifestó que los cambios han sido introducidos para reducir el coste, previsto ahora en unos 9.000 millones de pesetas.

En la plaza al aire libre prevista inicialmente en el solar colindante a la Alhóndiga, se propone ahora ubicar varios edificios. "La solución del cubo permanece con un desarrollo funcional que antes no tenía", indicó Sainz de Oiza, director del proyecto del Centro Cultural de la Alhóndiga de Bilbao, en el que también participa el escultor Jorge Oteiza. El nuevo diseño ha intentado aumentar la funcionalidad de la plaza cubierta, al levantar en dos lados del cubo una doble pared de diez pisos de altura que permite disponer de un espacio cercano a los 12.000 metros cuadrados. Bajo el edificio cúbico quedarán instaladas subterráneamente las áreas del conservatorio y salas de audición.El nuevo proyecto introduce cambios importantes en el solar colindante a la Alhóndiga, donde se construirá un edifico de varias pisos apoyado en la manzana contigua y otro de planta cuadrada para albergar la biblioteca pública. La plaza cubierta por el cubo de cristal, de 15.000 metros cuadrados de superficie, ocupa el interior del edificio de la antigua Alhóndiga, del que sólo se conserva la fachada. El proyecto será presentado para su aprobación en el pleno municipal a finales de mes.

El Centro Cultural que se pretende construir sobre la antigua Alhóndiga, ubicada en el centro de la ciudad y fuera de servicio desde hace 16 años, cuenta con un presupuesto de 9.000 millones de pesetas. Esta cantidad será financiada conjuntamente por el Ayuntamiento de Bilbao, la Diputación de Vizcaya, y los departamentos de Cultura y Educación del Gobierno, Vasco. El proyecto prevé la Instalación de biblioteca, conservatorio, museo de arte contemporáneo y casa de cultura, sobre una superfie de más de 35.000 metros cuadrados.