Las elecciones generales marroquíes, retrasadas dos años tras el referéndum

Las próximas elecciones generales marroquíes, que debían celebrarse en el verano de 1990, serán retrasadas dos años tras el referéndum celebrado ayer en el reino jerifiano. La aplastante victoria del sí era indudable, dado que el propio rey Hassan II había invitado personalmente a los marroquíes a votar en ese sentido. Con muchas reticencias, la oposición se había inclinado frente a la decisión real.

Unos nueve millones de electores habían sido convocados a pronunciarse a favor o en contra de la prórroga del mandato del actual Parlamento, elegido en 1984.Desde la independencia marroquí, en 1956, en el país magrebí sólo ha habido tres procesos electorales y ninguna de las Cámaras surgidas de los; mismos ha concluido regularmente sus mandatos. La disolución anticipada o la prórroga de la legislatura parecen haberse convertido en cosas corrientes en la política marroquí. En diversos períodos el país ha sido así o estuvo gobernado por leyes de excepción.

Los cuatro principales partidos de la oposición legalizada -los nacionalistas del Istiqlal, la Unión Socialista de Fuerzas Populares, los comunistas del Partido del Progreso y del Socialismo y los marxistas leninistas de la Organización de Acción Democrática y Popular- han aceptado con resignación la propuesta real de retrasar las elecciones formulada en un discurso televisado el pasado 22 de noviembre, sólo nueve días antes de la celebración de la consulta. No obstante, la oposición no había desarrollado en los días previos al referéndum una activa campaña a favor del sí, y, en su mayoría había aprovechado la ocasión para poner en cuestión la legitimidad democrática. del actual Parlamento, surgido de unas elecciones cuyos resultados considera que fueron falsificados. La oposición cuenta en la Cámara con 90 escaños sobre 306.

La cuestión saharaui

Sólo un dirigente de la oposición, el socialista Abderrahim Buabid, intervino en la televisión en las vísperas del referéndum de ayer, para aprobar explícitamente la prórroga de la legislatura. Según Buabid, lo importante ahora para Marruecos no son las elecciones, sino acabar con la cuestión del Sáhara". Buabid acusó abiertamente a Argelia de apoyar la actual escalada militar del Frente Polisario y de estar detrás de los últimos cuatro ataques armades de los independentistas saharauis.La prórroga de dos años de la actual legislatura es considerada por Hassan II y también por la oposición como el último plazo que Marruecos da a la ONU para llevar a cabo el referéndum de autodeterminación en el Sáhara occidental. De hecho, la propaganda institucional insistió durante la corta campaña del referéndum en que votar sí al aplazamiento de las elecciones era votar a favor de la rápida resolución del conflicto del Sáhara.

Las fuerzas democráticas marroquíes desean también que su aceptación del retraso de las elecciones sirva para que Marruecos termine por convertirse plenamente en un estado de derecho. La liberalización de la vida política marroquí que siguió al gran pacto nacional sobre el Sáhara occidental, en 1975, está estancada en los últimos años. El Parlarnento tiene un peso escaso o nulo en las grandes decisiones y siguen existiendo presos políticos en las cárceles marroquíes.