Hombre de confianza de los generales

Es difícil definir a Turgut Ozal con tres palabras. Es el nuevo presidente de la República de Turquía, un personaje arabesco, pronorteamericano y musulmán convencido.Hombre de confianza de los generales -autores del golpe de Estado de 1980-, su estrella empezó a brillar con el golpe militar como viceprimer ministro encargado de los asuntos económicos.

Ozal se convirtió en primer ministro tras las elecciones convocadas bajo el régimen militar y siguió ejerciendo como tal después de las elecciones democráticas de 1987. El nuevo presidente se considera "fruto del golpe de Estado militar", pero la oposición estima que representa un accidente en el proceso democrático turco.

El líder conservador, que se ha convertido a sus 63 años en el octavo presidente de la república, se vanagloria de leer únicamente las viñetas de Lucky Luke, lo cual explica sus dificultades para delimitar y comprender los temas vitales de la democracia en Turquía. En efecto, ante asuntos primordiales de la democracia como el pluralismo político, los derechos del hombre y las libertades fundamentales, se pueden percibir rápidamente las limitaciones intelectuales del ahora presidente. "No es asunto grave si se viola una vez la Constitución". Esta frase citada por el propio Ozal es fruto de su estado de ánimo.

El nuevo presidente trata asimismo de convertir a Turquía en el decimotercer miembro de la Comunidad Europea.