Buscar nuevas soluciones

Nadie pretende tener la solución para combatir el terrorismo. Pero parece ser que en el último año, el mundo occidental en general, y Estados Unidos en particular, ha dejado esta cuestión pendiente. Aparentemente hay un propósito común, dejar que se solucione por sí mismo. Como si el presidente Bush y otros dirigentes occidentales trataran de evitar enfrentarse al problema porque no han encontrado respuestas efectivas.La réplica de la Administración de Bush a la última crisis no ha resultado muy convincente. Los funcionarios han criticado más duramente el secuestro deun terrorista por Israel, que parece haber precipitado el asesinato del teniente coronel William Higgins, que el que los terroristas de Hezbolá lo hubieran. secuestrado a él primero. Por ejemplo, Bush afirmó el lunes que "secuestrar a alguien no resulta de ninguna ayuda para el proceso de pacificación de Oriente Próximo. Los trágicos y brutales acontecimientos de hoy demuestran la validez de esta aseveración". Y sus esfuerzos se han encaminado a impedir nuevas venganzas contra los rehenes que todavía retienen.

Está bien, pero no es suficiente, sobre todo si tenemos en cuenta lo blandas que han sido las respuestas de Occidente al terrorismo en los últimos tiempos. George Bush no debe esperar ercontrar una solución milagrosa. Pero puede hacer algo para reagrupar al mundo occidental, e incluso también a la Unión Soviética, en un nuevo frente común.

3 de agosto