Ensidesa invertirá 28.000 millones de pesetas entre Asturias y Sagunto

El grupo Ensidesa ha presentado para su aprobación ante la Comunidad Europea y el Ministerio de Industria un plan de inversiones en nuevas instalaciones industriales por un valor de unos 28.000 millones de pesetas que se realizarán en Asturias y en su filial Sidmed, de Sagunto, según informó ayer su presidente, Fernando Lozano. La empresa siderúrgica estatal redujo en el pasado ejercicio sus pérdidas por quinto año consecutivo, y obtuvo, por vez primera desde 1976, un cash-flow (beneficios más amortizaciones) positivo. Las pérdidas en 1988 ascendieron a 6.915 millones de pesetas, inferiores en un 40% a las del año precedente, y el cash-flow a 1.715 millones.Ensidesa alcanzará la rentabilidad en el presente ejercicio, de acuerdo con las exigencias comunitarias. Al 31 de mayo pasado, la empresa estatal ya había obtenido unos resultados positivos de 3.000 millones de pesetas. Además de los resultados típicos de la explotación, la compañía tiene previsto obtener unos ingresos atípicos por valor de 4.000 millones de pesetas, como consecuencia de la venta de bienes patrimoniales ociosos.

No obstante esta mejora notable de los resultados, el presidente de la sociedad reiteró ayer la necesidad de recortar aún más los costes internos de la compañía para garantizar el mantenimiento de la rentabilidad en ejercicios venideros, y anunció nuevas dificultades para el sector siderúrgico: "Si no estamos en condiciones de igualdad con nuestros competidores en costes, rentabilidad, etcétera, nos esperan muy malos tiempos", manifestó. "Estamos progresando, pero debemos hacerlo aún a mayor velocidad".

Las inversiones solicitadas por Ensidesa consistirán en duplicar la capacidad productiva de la instalación de electrofincado y níquel de Sidined, en Sagunto; instalación de una línea de galvanizado para automóviles en esta misma filial, y creación de una línea de prepintado en Asturias, posiblemente en Mieres. Meses atrás, el Ministerio de Industria ya había dado autorización a Ensidesa, al igual que a su competidor Altos Hornos de Vizcaya, para dotarse ambas de una línea de recocido continuo de hojalata.

Ensidesa mejoró su cifra de negocio en 1988 en un 12,6% (facturó 153.231 millones de pesetas), aun cuando redujo su producción en un 11 %. Las ventas en el mercado nacional mejoraron un 22,67. y las exportaciones se redujeron en un 14,5%.