Cientos de integristas, detenidos en Egipto durante la jornada electoral de ayer
Cientos de miembros de la Cofradía de los Hermanos Musulmanes fueron detenidos ayer en Egipto durante la celebración de las elecciones legislativas, cuyos resultados no se conocerán hasta dentro de dos o tres días. En los barrios populares cairotas, los militantes islámicos probaron que, junto al partido del presidente Hosni Mubarak (él Partido Democrático Nacional), son la fuerza política más activa de Egipto.
Alcanzado por un coche, un burro sangraba por la boca en las cercanías del club deportivo juvenil Kala, al pie de la gran mezquita de Saladino. A la entrada, un viejo vendía coranes y juguetes de plástico, y más allá otro fumaba un narguile. El club, convertido ayer en colegio electoral, está en el área de Al Jalifa, uno de los cementerios cairotas habitados por cientos de miles de personas.Un grupo de periodistas extranjeros fue recibido por un hombrecillo calvo, con gafas de sol inmensas, que, pese al calor veraniego de la jornada, vestía un traje a rayas grises, chaleco incluido. Dijo ser gerente de un hotel estatal y representante en el barrio del partido de Mubarak.
"Comprueben que en Egipto hay verdadera democracia", afirmó. Las votaciones se desarrollaban del siguiente modo: el elector, uno cada 10 minutos, llegaba ante una mesa, mostraba su documento de identidad y recibía dos grandes hojas. En una estaban los partidos en liza, reconocibles por sus emblemas: una mano abierta, un reloj, una palmera, una media luna y una estrella de cinco puntas. En la otra, hasta 90 candidatos independientes, que se identificaban por una silla, una mariposa, una herradura, un piraguas, un tanque, una pirámide y multitud de otros dibujos.
El elector se escondía detrás de un pizarrón y marcaba sus preferencias en ambas hojas. Luego, sin sobre alguno, depositaba cada una en urnas distintas. Las urnas eran cajas de mala madera, con una ranura y un candadito.
Si la afluencia de votantes era escasa, los pasillos hervían. Decenas de muchachos, muchos descalzos, esgrimían panfletos con los símbolos de los partidos e independientes. La ley electoral egipcia autoriza a hacer propaganda en el interior mismo del colegio electoral.
El grupo más numeroso era, de lejos, el de los Hermanos Musulmanes. Uno de los jóvenes barbudos se dirigió a los periodistas y arrebató la condición de anfitrión al hombrecillo del partido de Mubarak. "He leído todo sobre jomeinismo, marxismo y capitalismo, y afirmó que el islam es lo mejor", dijo. Añadió. llamarse Yahi Mohamed Mahmud, y, delante de su rival, declaró: "Pueden detenerme en cuanto ustedes se vayan, pero no tengo miedo".
Cuando los informadores dejaron el club Kala, el militante islámico y el partidario de Mubarak estaban enzarzados en una agria discusión. Dos jóvenes policías en uniforme negro les miraban asustados.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Archivado En
Últimas noticias
Asesinado a balazos un exinspector de la Fiscalía de Sinaloa en Culiacán
“Hemos ido de lo peor a lo mejor”: Trump exagera los logros de su primer año en un discurso a la nación
La Cámara de Representantes rechaza dos propuestas para impedir a Trump lanzar un ataque unilateral contra Venezuela
Los campesinos amagan con revivir las protestas en México por los precios de las cosechas
Lo más visto
- La población de pumas de la Patagonia se dispara gracias a una presa inesperada: los pingüinos
- El Supremo ordena al ex fiscal general el pago de la multa y la indemnización a la pareja de Ayuso que le impuso al condenarle
- El Gobierno de Mazón pagó 107 millones de euros más a Ribera Salud al aumentar su aportación por ciudadano
- Elon Musk, más cerca de ser el primer hombre en alcanzar una fortuna de un billón de dólares
- Víctor Manuel, músico: “El capital tiene que rectificar, nunca pensé que fueran a ser tan voraces”




























































