Un ex sacerdote católico dirige la guerrilla Comunista en el norte de Filipinas

Conrado Balweg, sacerdote católico convertido en jefe guerrillero comunista, asegura que los hombres a su mando han realizado importantes progresos en su lucha contra el presidente filipino,Ferdinand Marcos,_e insiste en que la revolución es la única esperanza para los filipinos. "Una revolución es una declaración de guerra justa contra un sistema injusto", afirma el dirigente guerrillero, que tiene 41 años.

Conrado Baiweg se unió en 1979 al Nuevo Ejército del Pueblo comunista. Hoy exhibe un cinturón de municiones y sobre su mesa de campaña reposa un fusil ametrallador.Las autoridades e Manil han puesto precio a su cabeza 16,5 millones de pesetas. El cura guerrillero convocó en su refugio de las montañas del norte de Filipinas a un grupo de periodistas, que realizó una larga excursión hasta hallarle..

Baiweg considera que las elecciones se han convertido en una farsa y que la corrupción en el Gobierno continúa incontroladamente. "La revolución es la única opción para la actual sociedad filipina".

"Durante más de un año he mos combatido al régimen sin sufrir una sola baja, ni siquiera un solo herido. Esto es todo un récord, ya que durante los pasados tres años hemos tenido una cuota de un guerrillero muerto por cada 14 soldados eliminados", afirma Balweg.

El sácerdote-guerrillero expli ca que desde marzo del año pa sado sus tropas han dado muerte a 46 soldados y seis informa dores y han capturado 79 armas de guerra en 29 enfrentamientos armados con tropas gubernamentales.