Romancero gitano

Acabo de leer en EL PAIS del 11 de abril el artículo editorial Romancero gitano, cuyo contenido he esperado ver en ese lugar del periódico durante demasiados días. Le felicito por el mismo, pero debo señalarle la en mi opinión contradictoria actuación de su periódico en todo este asunto. Las veces que el tema ha estado en primera página, la extensión que se le ha dedicado, los medios tipográficos utilizados y, lo que es más importante, el contenido de la información, se han acercado más al tratamiento que la Prensa amarilla y las revistas del corazón han dado al tema que la que corresponde a un periódico que pretende la modernización de España. Porque al suceso, que en un país normal no debería ocupar más allá de un modesto espacio en la página de sucesos, se le ha dado un tratamiento desmedido por los medios de comunicación, incluido EL PAI S, que ha alimentado "los más detestables atavismos -discriminadores, machistas y acomplejados- de la sociedad española", como justamente se señala en su editorial.El problema está, en mi opinión, en que este tipo de sucesos, que pertenecen sin duda a la España más negra, pero todavía vigentes en la sociedad española, tienen gancho comercial y venden mucho. EL PAIS ha estado muy atento en este caso a su cuenta de resultados, lo que es bueno en general, pero a veces esa atención se contrapone a las ideas que se dicen defender-