El PNV se sentirá desligado del estatuto si se 'nivelan' las autonomías, afirma Sudupe

El presidente del Consejo Nacional (órgano ejecutivo) del PNV, Romín Sudupe, aseguró ayer ante las cámaras de la televisión vasca que es consciente de que en algunas de las ponencias que serán discutidas en el próxima congreso del PSOE se defiende "la nivelación de todas las autonomías". Sudupe explicó que, de ser así, y si ello implicase "romper el pacto que supuso el Estatuto de Guernica, nosotros nos consideraríamos también libres de ese compromiso y actuaríamos en consecuencia", explicó.

Sudupe admitió también la existencia de serias divergencias en su partido, que atribuyó a su naturaleza interclasista, así como a la dificultad de adaptación al tránsito, en siete años, de la clandestinidad a la responsabilidad del poder.Según el máximo dirigente del PNV, las tensiones actuales se ven favorecidas por "el reto que supone la experiencia inédita de estructurar internamente el país".

Por lo demás, el cruce de declaraciones contrapuestas se prolongó ayer con nuevas tomas de postura. Así, el Consejo Nacional del PNV reprendió públicamente al diputado general de Vizcaya (presidente de la Diputación), José María Makua, por su confesión de haber negociado unilateralmente algunos aspectos de la nueva ley ole Régimen Local con el ministro de Administración Territorial.

Makua, por su parte, acusó al presidente del Parlamento vasco -que la víspera había mostrado su indignación por unas declaraciones realizadas por el presidente de la Diputación alavesa- de haber realizado "una lectura apresurada y superficial" de sus palabras.

El lehendakari Carlos Garaikoetxea, por su parte, reconoció ayer que "existe dificultad" para un acuerdo en el Parlamento vasco sobre la interpretación de la ley de Territorios Históricos, pero precisó que está dispuesto a llegar a un consenso con todos los grupos.

Tercera derrota del PNV

Por otra parte, la ausencia temporal de la Cámara del Iendakari, convaleciente de una pequeña intervención quirúrgica, propició el martes en Vitoria la tercera derrota del Gobierno vasco en el Parlamento autónomo.

La derrota se produjo al votarse una enmienda de Euskadiko Ezkerra (EE) por la que se emplazaba al Ejecutivo de Vitoria a presentar un plan para la reconversión del sector naval, alternativo al auspiciado por el Gobierno central.

Los diputados del PNV, 31 en ese momento, por ausencia de Garaikoetxea, votaron en contra, y la totalidad de los representantes de la oposición, 32 diputados, votaba a favor.