Havelange apoyará la candidatura de Barcelona para los Juegos de 1992

El presidente del Gobierno español, Felipe González recibió del presidente de la FIFA, João Havelange, la promesa de apoyar, sin que nadie se lo pidiese, a Barcelona como sede de los Juegos Olímpicos de 1992.El presidente de la FIFA (federación internacional de fútbol) y miembro del COI (comité olímpico internacional) confirmó el ofrecimiento de su apoyo en una conferencia de prensa que celebró en la Federación Española de Fútbol, horas después de que fuese recibido por Felipe González. También aseguró João Havelange que se permitió recordar al presidente del Gobierno Español la conveniencia de que los clubes de fútbol se aseguren la percepción un mayor procentaje del dinero de las quinielas.

Havelange, de cuya credibilidad e interesados ofrecimientos no es extraño que dude la actual Administración al tener en cuenta su estrecha amistad con Pablo Porta, justificó su apoyo a Barcelona como sede los Juegos Olímpicos de 1992 "al preguntarle a Felipe González si el Gobierno español tiene interés en que se celebren en la Ciudad Condal. Me costestó que sí. Como ciudadano de un país suramericano como Brasil le prometí entonces que trabajaré para que el Comité Olímpico Internacional designe a Barcelona para ese acontecimiento".

El presidente de la FIFA, que en su audiencia con Felipe González no pudo estar acompañado de Pablo Porta, al no ser invitado, como tampoco estuvo presente el Secretario de Estado para,el Deporte, Romà Cuyàs, aseguró contar con unos 40 votos que delegarían su representación en él para votar la candidatura de los Juegos Olímpicos de 1992.

Mejor trato al fútbol

Havelange, además, aprovechó la oportunidad de entrevistarse con el presidente del Gobierno para trasladarle una de las peticiones que los clubes de fútbol, a través de la Junta de Gobierno de la Federación, con la que se reunió ayer, le encomendaron: que la Administración considere la necesidad que las entidades futbolísticas tienen de recibir más dinero de las quinielas. Éste parece ser la obsesión de Porta, al estimar irreversible su cese, por real decreto, como presidente de la Federación. No extraña, por tanto, el momento en que João Havelange ha planteado al presidente del Gobierno español estas dos cuestiones, como si estuviesen relacionadas.

João Havelange, como buen diplomático, no tuvo más que palabras de elogio para la impresión que el Mundial-82 dejó en el mundo, y así se lo contó al presidente de un Gobierno, que, según informe de uno de sus organismos, la Intervención General de Estado, se ha planteado ciertas dudas sobre las cuentas federativas de se campeonato.

Havelange se entrevistó también con José Luis Vilaseca, director de Deportes de la Generalitat y miembro de la UEFA.