¡Tú también, Bruto...!"

Vergonzoso. De vergonzosa podría calificar su actitud o la del responsable de la publicación del, panfleto -inserto, en su diario el 2 de octubre- llamado ¿Quién quiere matar a Nacho? Pocas, muy pocas veces mi indignación ha alcanzado las cotas logradas al encontrarme con este deleznable informe rayando el más puro estilo fascista. No voy a entrar a discutir la zafiedad del texto, obra de una llamada Asociación Pro-Vida, cuya altura cultural, intelectual, humana y social queda bien patente ante la ridiculez del planteamiento. Lo que no entiendo es cómo su periódico publica dicho texto (íntegro y a doble página) y permite:

1. El calificativo de asesinato al aborto bajo la frase jurídica "supresión violenta de la vida".

2. La equiparación tortura-aborto, referida al feto.

3. Aceptar la frase "Ruego su reproducción y difusión", referida a dicho texto.

No, no voy a entrar a discutir el tema del aborto. Aborto, sí -el que lo quiera- y punto. Pero la actitud del principal medio de comunicación escrito de este país al responder al anterior ruego me parece reprobable. Su línea no es ésa; ni la de sus redactores y colaboradores (Maruja Torres, Rosa Montero, Cueto, Vicent... ¿sigo?), ni tampoco la de sus lectores, en general. Respétenos, respételes y respétese. Esta publicación es incalificable en su periódico.

¡Ah!, y con el mismo derecho, ruego encarecidamente la reproducción y difusión de esta mi indignación -y la de muchos más en su periódico. /