Un muerto y 16 heridos, en una reyerta entre familias gitanas

Antonio Amador Amador falleció ayer por la mañana al recibir una puñalada en una reyerta entre dos familias gitanas que se produjo en el mercadillo de la ciudad alicantina de Benidorm. El enfrentamiento comenzó por la disputa de un trozo de terreno para ubicar los respectivos tenderetes. Poco después se entregó a la policía el autor de la muerte de Antonio Amador, Ramón Suero Pérez, de 30 años.

Los hechos comenzaron hacia las ocho de la mañana, cuando las dos familias gitanas llegaron al mercadillo de Benidorm y coincidieron en el mismo lugar con la intención de instalar sus respectivos tenderetes. Los miembros de las dos familias se enzarzaron en una espectacular reyerta en la que murió Antonio Amador y resultaron heridas dieciséis personas entre ellas Antonio Suero Vargas, de 64 años, y su mujer, Paula Pérez Jiménez, de 63.

Cuando este matrimonio llegó al mercadillo comprobó que el lugar que habían utilizado durante los siete días anteriores estaba ocupado por Antonio Amador. Comenzaron los insultos y salieron a relucir barras de hierro y navajas. La Policía Municipal tuvo que realizar seis disparos intimidatorios.

A pesar de la intervención policial, Ramón Suero Pérez, hijo del matrimonio, hirió a Antonio Amador en el costado, atravesándole el bazo y un pulmón. La lucha se recrudeció en ese momento, y los padres del agresor resultaron con fractura de cráneo y brazos.

Antonio Amador fue inmediatamente trasladado a la clínica Fátima, donde ingresó cadáver, y el matrimonio herido a la residencia 20 de Noviembre, de Alicante, en gravísimo estado.

El agresor, Ramón Suero Pérez, de treinta años, escapó campo a través y posteriormente se entregó voluntariamente a la Guardia Civil en el cuartel de Villajoyosa.