Toque de queda y 'ley seca' en Popayán

El toque de queda y la ley seca rigen en Popayán (Colombia) desde el lunes para luchar contra los incidentes y el pillaje. Los habitantes de la ciudad, donde se han contabilizado 234 muertos y cerca de 1.200 heridos como consecuencia del terremoto que la destruyó en un 60%, han comenzado a emigrar. Las medidas tomadas por las autoridades prohíben el acceso a la ciudad desde las nueve de la noche hasta las cinco de la mañana. Tras la multiplicación de robos y agresiones que siguieron al terremoto se han formado brigadas especiales de vecinos que patrullan por la noche.El éxodo ya ha comenzado y al menos un millar de familias, que llevaban consigo los escasos bienes que han podido salvar, ha abandonado la ciudad. El tráfico es muy lento en la carretera panamericana, especialmente en los treinta kilómetros que separan Popayán de Cali, debido a las largas colas de vehículos y camiones que salen de la ciudad. Según las autoridades, la emigración podría afectar a unas 50.000 personas, la cuarta parte de la población de Popayán.