La dirección catalana de AP desconfía de la "operación relevo" de Planas

Un profundo malestar ha despertado en las bases y ejecutiva barcelonesa de Alianza Popular (AP) la decisión unilateral de la dirección de Madrid, tomada al margen de los órganos directivos catalanes, de introducir cambios en la presidencia de AP de Barcelona, con la sustitución de Miguel Angel Planas por el director de la Feria de Barcelona, Doménec Romera.Para explicar esta decisión de Manuel Fraga, adoptada con el consentimiento de Planas y Romera, el secretario general aliancista, Jorge Verstryrige, se reunió ayer en Barcelona con los miembros de la dirección, ante quienes aseguró que el relevo se había considerado necesario para cambiar la imagen que Planas había dado a AP, "calificada de negativa injustamente", dijo. Pese a esta reacción contraria a los cambios que protagoniza Romera, se da como firme su nombramiento en el congreso barcelonés de AP del día 6.

Mientras Romera efectuaba ayer sus primeras declaraciones, dirigentes cualificados del partido manifestaban a este diario su sorpresa por la "operación relevo" y el desconocimiento de su alcance. Sin expresar una oposición personal a Romera, "al que no conocemos, y que ni siquiera es militante barcelonés de AP", mostraron su disgusto por el método seguido para el recambio, en especial porque todas las consultas hechas a Madrid ante los rumores del cambio de Planas habían sido desmentidas hasta poco antes de conocerse la sustitución.