Buenos Aires recibe como héroes a los 183 argentinos capturados por los británicos en las Georgias del Sur

Los 183 argentinos, civiles y militares, y los cinco extranjeros que fueron capturados por tropas inglesas durante la reconquista de las islas Georgias del Sur, hace 19 días, llegaron ayer al puerto de Buenos Aires y fueron recibidos como héroes por numerosas personas que les aplaudían y vitoreaban en un clima de gran emoción y entre el ulular de las sirenas de los barcos surtos en la dársena norte.

El grupo de civiles que se encontraba en las Georgias del Sur al producirse la invasión inglesa está compuesto por 34 argentinos, dos chilenos, dos uruguayos y un español. Todos ellos fueron contratados el pasado mes de marzo para desmantelar una antigua factoría ballenera en la isla de San Pedro, la principal de las Georgias, situada a unos 1.500 kilómetros al este de las Malvinas.El español está bien

Del ciudadano español se sabe únicamente que su nombre es Vicente Cacabelos Feijoo y que se encuentra bien. Un funcionario de la embajada española en Montevideo pudo hablar brevemente con él y manifestó que se encuentra perfectamente.

Fueron precisamente los civiles quienes hicieron detonar esta crisis, al izar una bandera argentina en las islas Georgias el pasado 19 de marzo. Tras la protesta británica y la amenaza de enviar un navío de guerra para desalojar a los civiles argentinos, el Gobierno de Buenos Aires decidió invadir las Malvinas el 2 de abril, y las Georgias, un día más tarde.

Entre los 149 militares argentinos que fueron devueltos por el Reino Unido, a través de la Cruz Roja Internacional, figuran ochenta miembros de la tripulación del submarino Santa Fe, destruido por helicópteros británicos al iniciarse el ataque contra Grytviken, la principal localidad del archipiélago, el pasado 25 de abril.

El resto del personal militar era la guarnición argentina en la isla de San Pedro, aunque se desconoce si, como pretende Buenos Aires, quedan aún efectivos militares allí realizando acciones de hostigamiento contra los ingleses. El capitán Alfredo Astiz quedó retenido en la isla británica de Ascensión, a petición de los Gobiernos de Suecia y Francia, que tienen interés en interrogarle sobre la suerte de ciudadanos de sus países torturados o desparecidos en Argentina. El citado oficial está, al parecer, implicado en algunas de esas actividades.Los ex prisioneros viajaron desde la colonia británica de Ascensión a Montevideo en un avión fletado por la Cruz Roja. En la capital de Uruguay fueron entregados a las autoridades argentinas, que les embarcaron inmediatamente un un navío de guerra, con destino a Buenos Aires.

Durante la travesía, los ex prisioneros informaron a las autoridades argentinas de las circunstancias en que se desarrollaron los combates de las islas Georglas del Sur y fueron objeto de reconocimientos médicos. Se ignora cuándo se les permitirá hacer declaraciones públicas, pero sus revelaciones serán de gran interés para saber qué-pasó realmente el 25 de abril en el archipiélago y hasta qué punto se resistió al desembarco inglés.

La jornada del jueves transcurrió sin incidentes bélicos en el Atlántico sur, según informó el Estado Mayor Conjunto argentino. Pero los rumores sobre las serias averías sufridas en los combates por el portaviones británico Hermes, que estaría navegando lentamente hacia algún puerto donde pueda ser reparado, se intensificaron ayer. El subsecretario de Asuntos Exteriores de Venezuela, Osvaldo Páez Pumar, dijo ayer que el primer ministro de Curajao, una posesión holandesa con Gobierno autóribrno de las Antillas, había rechazado el ingreso del buque inglés para ser reparado en los astilleros de la isla, situada a unos 75 kilómetros de la Costa de Venezuela.

Desde los primeros combates del pasado 1 de mayo corrieron rumores de que el Hermes había sido alcanzado por el fuego de los aviones argentinos, pero el Estado Mayor Conjunto sólo lo afirmó en un primer momento, sin que haya vuelto a hacer alusión alguna al tema. En fuentes militares se comentó que los pilotos que atacaron y destruyeron al destructor Sheffield dijeron que habían hecho blanco también en "otro barco más grande".