Nombrado el nuevo Gobierno argentino ante la indiferencia general

El presidente argentino designado y jefe supremo, del Ejército de Tierra, teniente general Leopoldo Galtieri, nombró, ante la indiferencia casi general de la población, los ministros que le acompañarán en su gestión de gobierno a partir del próximo 22 de diciembre.

De los diez ministros que integrarán el Gabinete nacional, tres militares y siete civiles, cuatro son reincidentes, es decir, que desempeñaron con anterioridad alguna cartera, tanto en Gobiernos civiles como castrenses.El hecho de que Galtieri haya tenido que recurrir a figuras políticas y a economistas ya suficientemente conocidos significa, para muchos analistas, que no se perfilan nuevos valores en la política nacional argentina, en ningún modo ajena a la apatía general.

El Gabinete de Galtieri, el "hombre fuerte" del "proceso militar" que inaugurará el día 22 su tercera etapa desde 1976, después de las Administraciones de los generales Jorge Videla y Ro berto Viola, contará en la dificil cartera de Economía con Roberto Alemann, que fue ministro de Economía con Arturo Frondizi, mientras que en la de Relaciones Exteriores figurará Nicanor Costa Méndez.

El economista católico Cayetano Licciardo, ministro de Hacienda y Finanzas de 1971 a 1973, durante el Gobierno del general Alejandro Lanusse, será ministro de Educación, y Lucas Aires estará al frente del Ministerio de Justicia.

El ingeniero Sergio Martini, que venía desempeñando la Administración General de Gas del Estado, ocupará la cartera de Obras y Servicios Públicos, y el actual ministro de Justicia, Amadeo Frugoli, pasará a Defensa. Frugoli fue ministro de Bienestar Social de Lanusse en 1971.

Los observadores opinan que este va a ser el Gabinete más liberal de los últimos tiempos. Incluso citan a Alemann, a quien se ve un poco como "el salvador" en la más pura ortodoxia liberal, dando por sentado que las primeras medidas que tomará serán la reunificación de los mercados de divisas y la posterior flotación libre del tipo de cambio.

De cualquiera manera, el rasgo más previsible del Gobierno del general Galtieri es el ingreso de Argentina en una etapa de franca y desinhibida búsqueda de las mejores relaciones con Estados Unidos y la Europa occidental, como destacaba hoy el diario conservador La Nación, en Buenos Aires. En ese sentido, se apunta como fundamental el lanzamiento de los estatutos de los partidos políticos y un calendario preciso para retomar a la democracia electoral.