Violenta manifestación en Dublín en favor de los huelguistas del IRA

Una manifestación organizada por los comités de los bloques "H" en Dublín, se transformó ayer en una violenta confrontación entre un millar de policías y unos 15.000 irlandeses, a unos pocos metros de la Embajada británica en la capital del Eire. Con la inminente muerte del huelguista de hambre del IRA Kieran Douherty, diputado por la República de Irlanda, y el aparente fracaso de la delegación de la Cruz Roja en Belfast, los irlandeses mostraron su frustración.A media tarde, los manifestantes comenzaron a atacar a los miembros de la gardai, la policía irlandesa, que protegían la Embajada británica, temiendo que se repitiera la escena de 1972, cuando una manifestación incendió la sede de la Embajada de Londres, tras el llamado domingo sangriento. Ayer volaron los cócteles molotov y los ladrillos, y en algunos casos la propia policía contraatacó con los proyectiles que les lanzaban los manifestantes.

Tanto Douherty, de veinticinco años de edad, como su compañero Kevin Ynch, un año más joven, están acercándose a la muerte, tras 58 y 57 días, respectivamente, en huelga de hambre en la cárcel de Maze. De los seis presos republicanos ya fallecidos, tres murieron a los 61 días de ayuno, y otro a los 59 días. La llegada de la delegación de tres personas de la Cruz Roja había hecho renacer las esperanzas en una posible solución a la crisis de las prisiones del Ulster. Ayer, los presos, en una declaración a través del centro republicano en Belfast, agradecieron a la delegación sus esfuerzos de mediación con el Gobierno británico, opinando, sin embargo, que eran inútiles, pues "los británicos no están ni siquiera dispuestos a discutir un acuerdo".

En los disturbios de ayer resultaron heridos 88 policías y más de 100 civiles, algunos de ellos de gravedad. Según las cifras oficiales, al menos 12 personas han sido detenidas. Numerosos automóviles resultaron incendiados en los enfrentamientos, los más graves registrados en Dublín en los últimos años.