Situación emergencia en Avilés

Durante los días 26 y 30 de noviembre, ambos inclusive, Avilés vivió una clara situación de emergencia por los elevados índices de contaminación registrados, que llegaron a alcanzar, en algunas ocasiones, 540.000 partículas por centímetro cúbico de aire.

Las mediciones se realizaron con un contador de partículas con registro horario, propiedad del Departamento de Energía Nuclear de la Escuela de Ingenieros de Minas de Oviedo. Según el informe dado a conocer por el Centro de Análisis de la Contaminación Atmosférica de Avilés, los niveles de concentración sulfurosa alcanzados el día 30 están muy próximos a los de emergencia de primer grado. El grado de contaminación ha descendido en los últimos días. El Ayuntamiento de Avilés pretende imponer un impuesto sobre actividades contaminantes. Aunque en esta ocasión se han sumado condiciones atmosféricas agravantes, lo cierto es que el área de influencia de Avilés se aproxima con frecuencia a la situación de «emergencia de primer grado». Según reconoce un estudio realizado por la Subdirección del Medio Ambiente del Ministerio de Industria, entre los focos contaminantes destacan Ensidesa, la central térmica; Productos Dolomíticos, Asturiana del Zinc y Endasa.Siete municipios asturianos de la zona central costera -Gijón y Avilés entre ellos- pretenden desarrollar un plan contra la contaminación atmosférica que culminará, según el proyecto, con la creación de una mancomunidad para proteger el medio ambiente.