Coste de la vida

En primer lugar, diré que no concuerda, matemáticamente hablando, el que en el mes de marzo, según la tabla del coste de la vida del año 78 y lo que va del actual, inserta en las páginas de su diario del 26 del actual, relativa a la economía y el trabajo figure como aumento acumulado el 3,3% y el mes de abril el 5,20%. Lo que da como resultado que el IPC del mes de abril sea el 1,9% y no el 1,50%, como ustedes expresan. Salvo que haya error en los anteriores cálculos.En cuanto a que la «revisión no es necesaria y que las fuerzas sociales, empresariales y trabajadoras deben comprender lo delicado de la situación y lo incierto que puede ser una nueva fase negociadora, según dicen medios próximos al Gobierno (así constan en su diario) implica una falta de seriedad por parte de quien así se expresa y que daría como resultado que los trabajadores, en general, saldrían gravemente perjudicados y, en particular, aquellos sectores cuyos convenios se firmaron muy por debajo del tope del 14%, y los que sufrieron laudo, también en condiciones por debajo del expresado 14%.

Caso de producirse esta «recomendación», veríamos claramente los trabajadores que el Gobierno cumple en lo que favorece a los empresarios, por ejemplo: ningún sector de la producción sobrepasó el decreto sobre topes salariales del 14%, y cuando dicta otra ley que puede favorecer a los trabajadores, empieza por recomendar que no se haga uso de ella; pero de la recomendación al decreto ley hay tan sólo un paso, y esto es lo lamentable.