La Federación Española, en disconformidad con el Consejo Superior del Deporte

La Federación Española de Atletismo ha puesto en un brete al Consejo Superior del Deporte. No acepta que se le designe el mismo presupuesto para el año que viene, el mismo que éste, 138 millones de pesetas, y pide a su vez que se eleve al Gobierno la petición de que el atletismo sea declarado de utilidad pública. De lo contrario en España se seguirá cronometrando manualmente todos los campeonatos nacionales se celebrarán en Madrid y en los colegios se seguirá sin practicar el atletismo.Del 9 al 11 de diciembre se celebrará la asamblea nacional del atletismo. Los distintos comités, departamentos y comisiones han trabajado en días pasados en la elaboración de unos acuerdos para llevar a la asamblea. Los planes son ambiciosos y nada conformistas. Pero en ellos no se habla de utópicas medallas y sí de algo que puede ser una calidad: que el atletismo en España empiece desde los colegios.

Entre todas las decisiones tomadas para llevar a la asamblea hay varias de gran importancia y que pueden significar un profundo cambio en la política que se sigue en España con el atletismo. A la Federación Nacional le quieren dar para 1978 el mismo dinero que en 1977, es decir, 138 millones de pesetas. Esto se ha considerado inaceptable por cuanto los contactos con el extranjero son ahora más caros a tenor de la devaluación de la peseta. Este presupuesto dará para muy poco, indudablemente.

Hay en cartera un orden de preferencia para la construcción de nuevas pistas que tendría que esperar, al igual que la adquisición de aparatos para cronometraje eléctrico, cuyo valor es de un millón de pesetas; también podría darse el caso de que por falta de presupuesto todos los campeonatos nacionales se centralizasen en Madrid y de que todos los atletas que consigan rebajar récords nacionales cobren menos de las 50.000 pesetas que hasta ahora han venido cobrando.

Pero no todas las pretensiones giran en torno al aspecto económico. El querer que el atletismo sea declarado de utilidad pública, al igual que en otros países, conlleva el que en un futuro próximo su práctica sea obligatoria en todos los colegios por creer que es un deporte fundamental para la práctica de los demás. De ahí que haya un total desacuerdo con el convenio firmado unilateralmente por el Consejo Superior del Deporte con la Asociación Deportiva Española de Centros de Enseñanza por estimar que el atletismo escolar lo debe llevar la propia Federación Española sin intermediarios y sin distinciones de escolares que vayan a centros públicos, privados o religiosos.