Un festival folk para contentar a los espíritus

Existen lugares especialmente misteriosos y cargados de simbolismo en Galicia, pero hay uno que desde hace 34 años guarda todos los secretos del folk, la Carballeira de Zas. Este paraíso natural es el centro de uno de los festivales de música más importantes del norte de España y un referente indiscutible dentro de este género musical. Este fin de semana, los días 4 y 5 de agosto, regresa con su música y su magia a esta localidad ubicada en la Costa da Morte.

El cartel de la Carballeira de este 2017 está protagonizado por la banda finlandesa Korpiklaani y un nombre mítico dentro del género como es Gwendal, causantes del nuevo entusiasmo por la música céltica, que repasarán sus 45 años de carrera la noche del viernes en Zas. Los irlandeses Moxie se encargarán de rematar el toque internacional de una programación donde predominan los artistas locales y nacionales: Pan de Capazo, Radio Cos, Milladoiro, Rarefolk, Dequenvessendo, Fanfarria Taquikardia, Cé Orquesta Pantasma y Os fillos do Estramonio.

Como cada año, la tarde del sábado en Zas está pensada para compartir en familia, con zona de gastronomía —y queimada incluida—, espacio lúdico infantil, feria de artesanía y diferentes actuaciones de música tradicional protagonizadas por Castro-Meda. Todo tendrá lugar en una gran carballeira —robledal en español—, un lugar que para la Responsable del área de Cultura de la Diputación de A Coruña, Goretti Sanmartín, es muy especial "porque simboliza la esencia de ser gallego". En una atmósfera tan verde, el festival también mantiene su apuesta por la protección del medio natural con el cada vez más extendido vaso ecológico.

Con zona de acampada gratuita situada cerca del recinto del festival, las entradas para asistir a los dos días de la Carballeira de Zas se pueden adquirir por 15 euros y se pueden comprar a través de Ticketea. No te pierdas esta cita con la tradición, dónde la magia te hará corear junto a miles de asistentes el famoso grito de guerra de esta cita: Lume!. Este primer fin de semana de agosto sigue la leyenda, acude al Monte Castro y celebra el festival que mantiene contentos a los espíritus que rondan la zona.