A 10 días de las primarias de la izquierda chilena que se volvieron competitivas

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Muy buen jueves, queridos lectores:‌

Estamos a exactos 10 días de las elecciones primarias presidenciales de la izquierda chilena del domingo 29 de junio y, a diferencia de lo que se pensaba en marzo o abril, los candidatos se han tomado en serio sus papeles y -sorpresa- la campaña se ha vuelto competitiva y de final incierto. Lo dicen en la propia izquierda: incertidumbre total. Carolina Tohá, socialdemócrata, no tiene la victoria asegurada y, por el contrario, en los círculos oficialistas se habla de un posible triunfo de Jeannette Jara. Con el paso de los días, recuerdo insistentemente la declaración de intenciones de la exministra comunista cuando levantó su candidatura: que trabajaría para ganar. Nada de apuestas simbólicas.

No nos vamos a referir en específico a los resultados de las encuestas cuya difusión está prohibida por ley 15 días antes de las elecciones -circulan igual-, pero Jara se ha vuelto fuerte en las últimas semanas. ¿Le alcanzará la gasolina para superar a la que, al comienzo, era la favorita? ¿Ya la está sobrepasando? ¿Y por cuánto? Hace unas semanas se pensaba que el resultado tendría relación a la cantidad de gente que participe, pero, a estas alturas, se repite: incertidumbre total. Como referencia está la primaria de Apruebo Dignidad en 2021, entre Daniel Jadue y Gabriel Boric, cuando participaron 1.750.889 personas. Pero hoy en día no está claro que la mayor asistencia a las urnas ayude a una u otra candidata.

Pero, sea como fuere, la campaña se ha vuelto caliente. En los debates -lo mostraron el martes en radio Cooperativa- dejan en evidencia las tensiones, sobre todo las dos exministras de Boric, Tohá y Jara, que son las que tienen opciones de ganar (eso está bastante claro: el asunto se resuelve entre las dos). No se quedan calladas, se responden con fuerza y sobrepasan los límites de lo que quisieran los líderes del sector (Boric o la propia Michelle Bachelet), para cuidar la amistad cívica desde la misma noche del 29. ¿O volará todo por los aires? Al menos en lo formal, no: se cuidarán las formas. Pero eso no quiere decir que quede en pie algo parecido a una coalición. Hay muchos preocupados en el después.

Mientras, la derecha mira impaciente. Lo que ocurra en la izquierda con su candidatura única tendrá efectos inmediatos en la oposición. De ganar Jara -y de esta manera lo explica el comando de Tohá en las minutas que ha repartido entre sus portavoces- la derecha respirará con mayor alivio. Al menos Matthei aspira a quedarse con buena parte del voto moderado que respalda a Tohá desde la izquierda, aunque no parece evidente que lo logre, como alguna vez lo consiguió Sebastián Piñera.

Es, por los próximos 10 días, una noticia en desarrollo.

Los invito, mientras, a repasar las mejores crónicas, reportajes y entrevistas que hemos trabajado desde EL PAÍS Chile en la última semana.

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Eso por hoy, queridos lectores. Me despido desde este Santiago bastante frío en nuestra última entrega de otoño.

Nos reencontramos en una semana más, como cada jueves.

Un abrazo.