Complejos escenarios para un futuro incierto

El bloqueo de la CUP a los Presupuestos abre un escenario "incierto" de la legislatura catalana, como reconocía este martes la portavoz del Gobierno, Neus Munté. De momento, Junts pel Sí no ha definido cuál puede ser el futuro de la legislatura, si bien su primer objetivo es mantenerla, aunque son conscientes de que su minoría parlamentaria hará de cada paso que intenten dar una odisea. Los tres escenarios abiertos:

Convocatoria de elecciones. Poner fin a la legislatura e intentar fiar una nueva a otras geometrías parlamentarias es la medida más drástica que tiene sobre la mesa el Ejecutivo. Esa decisión, no obstante, está condicionada. El Estatuto de Autonomía no permite disolver el Parlamento hasta un año después de la última disolución de la cámara. Eso ocurrió el 4 de agosto del pasado año, cuando Artur Mas decidió convocar elecciones y plantearlas como unas plebiscitarias. A partir de ese día, se abriría un periodo de entre 40 y 60 días para celebrar elecciones. Se confirmaría la legislatura más corta desde el restablecimiento del Parlamento.

Mantenimiento de la alianza con la CUP. La tensión entre Junts pel Sí y los anticapitalistas ha alcanzado niveles máximos y el Gobierno catalán sentenció el martes que el veto presupuestario suponía también la ruptura del pacto de estabilidad. La única coincidencia entre ambas partes es la hoja de ruta soberanista, pero la ausencia de unos Presupuestos la ralentiza, según ha reconocido el propio presidente de la Generalitat. Existe la posibilidad de encomendarse a los Presupuestos de 2017 --como demanda la CUP-- para acelerar el proceso, pero esas cuentas llegarían demasiado tarde. Si la legislatura tienen que durar los 18 meses del proceso de desconexión estipulados por el programa electoral de Junts pel Sí, en julio del próximo año se tendría que finiquitar la legislatura y convocar elecciones constituyentes.

Geometría variable. Junts pel Sí podría intentar capear la que queda de legislatura con acuerdos puntuales con los distintos grupos, en función de la temática. La minoría del grupo que apoya al Gobierno y su principal objetivo (la independencia) complican ese escenario. La prórroga presupuestaria tampoco ayuda a la posibilidad de ofrecer concesiones por parte de Junts pel Sí.