La líder del PP valenciano se irá si el partido no secunda su pulso

La presidenta regional del PP en la Comunidad Valenciana, Isabel Bonig, ha asegurado que si la dirección nacional del partido la desautoriza por pedir el acta a los nueve concejales de Valencia investigados por un presunto blanqueo de capitales, se marchará. “No me siento desautorizada. ¿Alguien ha dicho públicamente que no se les pida el acta o que la señora Bonig se ha equivocado? El día que lo digan, yo me marcho”, dijo. La cúpula regional no actuará hasta que la dirección nacional del partido resuelva el expediente.

El PP abrió a mediados de marzo un expediente informativo a los ediles y asesores populares en el Ayuntamiento de Valencia por su presunta vinculación con el denominado caso Taula. Las conversaciones grabadas por orden judicial eran inaceptables para Génova, y el partido decidió abrir una investigación. El pasado lunes el comité de garantías suspendió de militancia a los nueve ediles, el 90% del grupo municipal del PP en el Ayuntamiento, pero aceptó que se quedaran como independientes tras negarse a entregar sus actas. Solo serán expulsados si se abre juicio oral.

La presidenta regional del PP valenciano, Isabel Bonig, ha optado desde el principio por medidas ejemplares ante la proliferación de casos de corrupción que salpican al partido, pero no ha conseguido hasta la fecha que los ediles acaten su disciplina y dimitan voluntariamente. Según aireó el PP valenciano, los concejales se comprometieron con Bonig hace un mes a irse tras el levantamiento del secreto de sumario pero, llegado el momento, éstos se han negado, debilitando el liderazgo de la dirigente regional.

Este miércoles se ha iniciado el plazo de 10 días que la dirección regional ha dado a los concejales para que dimitan porque, de no hacerlo, Bonig, que ha manifestado su intención de iniciar un expediente de expulsión, se ha mostrado convencida de que si Barberá es citada por la justicia, “adoptará la mejor decisión para no perjudicar al PP”.

La dirigente popular valenciana sí quiso destacar en su comparecencia que la dirección del grupo municipal recaerá sobre Eusebio Monzó, el único edil del PP en el Consistorio que no está investigado. “Será quien lleve la gestión, apoyándose en el partido y en la gestora de Valencia” que se creó tras la disolución.