Desaparece un cuadro de Zabaleta de 1958 tras una exposición

La obra Bodegón del pintor Rafael Zabaleta, pintado a tinta de color negro sobre papel en 1958, ha desaparecido de los fondos de la Universidad de Jaén (UJA), que era su responsable a través de la fundación Cesáreo Rodríguez-Aguilera. El cuadro había estado expuesto en el municipio Torredelcampo en el marco de la muestra itinerante Pro-porciones II, pero la Universidad advirtió su ausencia cuando estaba preparando su traslado hasta Quesada. A pesar de que la desaparición del cuadro se advirtió el pasado 20 de febrero, la UJA no lo denunció en la Comisaría de Policía hasta el pasado 21 de marzo.

El director del Secretariado de Publicaciones, Fundaciones Culturales y Proyección Institucional de la UJA, José Ángel Marín Gámez, ha explicado que la denuncia ante la Policía se ha realizado una vez que no se ha logrado ningún resultado en la investigación interna de la propia Universidad. Se sabe que el cuadro figuraba en los partes de entrega de los técnicos y transportistas cuando regresó tras ser expuesto en Torredelcampo, según informó el diario Ideal, por lo que su desaparición habría tenido lugar dentro del campus universitario. Marín Gámez no se atreve a hablar de robo y dice que una de las hipótesis es que el cuadro se haya extraviado. No obstante, la Policía tiene abierta la investigación como posible hurto, al no apreciarse fuerza en las puertas y ventanas de las dependencias donde se custodia.

Más que su valor económico ( su valor se estima en unos 10.000 euros), el Bodegón de Zabaleta tiene un indudable valor artístico. De estilo próximo al cubismo, la obra está pintada en la última etapa de Rafael Zabaleta (Quesada, Jaén, 1907-1960), uno de los genios del expresionismo andaluz en el pasado siglo. El cuadro fue donado por Zabaleta a su amigo y paisano Cesáreo Rodríguez-Aguilera, un jurista y crítico de arte que antes de su muerte en 2006 donó a la Universidad de Jaén un legado compuesto por más de 4.000 fondos bibliográficos. En esta donación destacaban obras de artistas con los que Rodríguez-Aguilera había cultivado una gran amistad, como Tàpies, Miró, Rafael Alberti, Eugenio D'Ors, Picasso y el propio Zabaleta.

En la Universidad jiennense ha sorprendido que el Bodegón de Zabaleta haya sido el único desaparecido de entre la docena de obras expuestas en la muestra itinerante Pro-porciones II. Son piezas representativas de lo que se ha dado en llamar vanguardias de mediados y finales del siglo XX en España y, además del cuadro de Rafael Zabaleta, hay otros óleos, dibujos, grabados o técnicas mixtas de artistas como Manuel Ángeles Ortiz, Cardona Torrandell, Brotat o Amelia Riera. El destino del Bodegón era el Museo Rafael Zabaleta de Quesada, donde el 21 de febrero se abrió la muestra itinerante Pro-porciones II que, precisamente, lleva en la portada de su catálogo la obra de Zabaleta. En el Museo de Quesada se encuentra el grueso de la obra del pintor jiennense, que también tiene cuadros en los museos de Arte Contemporáneo de Madrid y Barcelona y en diversas colecciones privadas.