Maneras de ver el cine

En 1945 Salvador Dalí fue contratado por David O. Selznick, a petición de Alfred Hitchcock, para crear la escenografía de una secuencia clave de la película Recuerda (Spellbound), protagonizada por Ingrid Bergman, Gregory Peck y Norman Lloyd. Recuerda es un thriller psicológico que trata sobre un sospechoso de asesinato que ha perdido la memoria por causa de un dramático incidente ocurrido durante su infancia. El único recurso para probar su inocencia es la improbable recuperación de su memoria, para lo cual contará con la ayuda de una psiquiatra.

Esas incursiones en la mente del protagonista fueron recreadas por Dalí en unos decorados surrealistas, inquietantes para el espectador. Impactante es la escena en la Peck recuerda una casa de juego repleta de grandes ojos en el techo que son cortados por un hombre con unas enormes tijeras, en un claro guiño a la famosa escena del ojo cortado rodada años antes por su amigo Luis Buñuel en El perro andaluz (1929). A esta le sigue otra no menos perturbadora en la que Peck corre por una especie de rampa perseguido por unas grandes alas mientras un enmascarado vigila desde lo alto de un tejado, interpretación del sentimiento de culpa que atenaza al protagonista y le hace vivir en una permanente huida.

Esta secuencia ha sido recreada por el pintor y grabador malagueño Paco Aguilar en Recuerda (2014), obra con la que ofrece su visión del mundo del cine junto a otros 14 creadores, reunidos en la muestra colectiva Acción, que hasta finales de mes se exhibe en el Taller Gravura de Málaga.

Francisco Peinado, Chema Lumbreras, David Escalona, José Luis Puche, Isabel Garnelo, Stephan von Reiswitz, Rafael Alvarado, Sebastián Navas, Laura Brinkmann, Lorenzo Saval, Alexander Reiswitz, Vargas Machuca, Javier Roz y Alba Blanco son los otros creadores que participan en esta iniciativa que se enmarca dentro del programa de actividades culturales del Málaga de Festival, anticipo del Festival de Cine de Málaga que se celebra del 21 al 29 de marzo.

Al igual que Aguilar, otros artistas interpretan escenas de títulos famosos, como Rafael Alvarado con la mítica escena final de Casablanca (1942) o Chema Lumbreras con La noche del cazador (1955). Otros, como David Escalona, reflexionan sobre la técnica de proyección (Sin título, 2104) o sobre el proceso de montaje, como la fotógrafa Laura Brinkmann en Secuencias (2011).

“Las paredes de Gravura se convierten así en una filmografía dispar compuesta por pinturas, fotografías, dibujos o collages para recrear maneras de ver el cine. Maneras de utilizar sus mitos, su lenguaje e incluso a los espectadores. 15 obras de acción que presuponen el paso de la potencialidad a la existencia. No sabemos qué va a acontecer; cada pieza es un estado liminal. Un umbral. Porque al grito de “¡acción!”, comienza todo”, explica Alba Blanco, quien presenta la fotografía Fuera de campo (2012).